Famosos lamentan el deceso de Facundo Cabral; Secretario General de la OEA se suma a la condena por asesinato

Alberto Cortez,  Andrés Calamaro, Ricardo Montaner, la Nobel Rigoberta Menchu y muchos otros repudiaron el asesinato del cantautor argentino, Facundo Cabral.

Secretario General de la OEA condena asesinato de Facundo Cabral

Washington, EEUU. El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, repudió enérgicamente el asesinato del cantautor argentino, Facundo Cabral, perpetrado a sangre fría el pasado sábado por una banda de sicarios en la ciudad de Guatemala.



imageUna foto tomada durante la última presentación de Cabral, realizada el jueves en Quetzaltenango, ubicada a unos 200 kilómetros de la ciudad de Guatemala. (Reuters)

"El asesinato de Facundo Cabral, un gran artista de nuestra América, comprometido con las causas más nobles de sus pueblos, sólo puede ser entendido en el marco de la criminalidad irracional que, por desgracia, agobia a la querida Guatemala y a otras naciones de nuestro hemisferio", declaró Insulza, consiga una nota de prensa del organismo internacional.

Agregó que "las versiones de que las balas asesinas no iban dirigidas a él, sólo aumentan nuestra indignación, porque comprueban que nadie está hoy a salvo de la acción asesina de los sicarios, ni siquiera alguien cuyas únicas armas eran la música y la verdad".

El máximo representante de la OEA concluyó señalando que "esta triste realidad debería servirnos para aumentar nuestra unidad y resolución de combatir a los clanes del crimen, principal amenaza de nuestra democracia, nuestra convivencia y nuestra cultura". Fuente: ABI, La Paz

Famosos lamentan el deceso de Facundo Cabral

El Heraldo de Chihuahua, 10 de julio de 2011

Chihuahua, Chihuahua.- El cantante y poeta argentino Alberto Cortez, residente en Madrid desde hace cuarenta años, se mostró desolado por el asesinato en Guatemala del cantautor Facundo Cabral, al que le unía "una gran amistad" y del que destacó su misticismo, que "la gente aceptaba con muchísimo gusto".

Cortez afirmó que la muerte de Cabral "ha sido un accidente dramático. Guatemala es un país que tiene varias bandas de narcotraficantes importantes, que andan a balazos limpios. De pronto le tocó a él; se equivocaron con el coche o vaya usted a saber qué pasó".

Cortez tenía "un gran conocimiento" del cantante asesinado, con el que, según recordó, recorrieron "juntos toda América durante cuatro años".

"Lo recuerdo como un buen amigo, que de pronto se volvió místico. Ese misticismo lo transmitía a la gente, y la gente lo aceptaba con muchísimo gusto", señaló el cantante y poeta argentino, que en 1994 presentó un espectáculo con su amigo Facundo Cabral, llamado "Lo Cortez no quita lo Cabral", con el que recorrieron países como México, España y Argentina.

"Tengo un recuerdo fantástico, excelente, de él. Siempre estuvo luchando por la paz", aseguró Cortez, que cantó con Facundo Cabral algunas de las canciones más famosas del cantante asesinado, como "No soy de aquí, ni soy de allá" o "Pobrecito mi patrón".

Por su parte, el cantautor argentino Andrés Calamaro publicó en su cuenta de Twitter una serie de mensajes donde lamenta la muerte de su colega, el trovador Facundo Cabral, quien fue asesinado a tiros esta mañana (sábado) en Guatemala. "Facundo Cabral No soy de aquí ni soy de allá. Vive para siempre", publicó Calamaro en su página.

El intérprete de Flaca también expresó su admiración por su paisano: "Un bohemio que se invento a sí mismo, un permanente viajero, ni de aquí ni de allá. Lo veía cuando era yo un niñato, en el café concert. Cabral Ferrocabral. Una vida de novela y de leyenda".

René Pérez Residente, el cantante del dueto Calle 13, fue uno de los primeros en manifestar su pesar. "Lamentable el asesinato de Facundo Cabral".

"Una lástima que ocurran semejantes atrocidades. Recordando a Facundo Cabral…Latinoamérica está de luto..", asegura el puertorriqueño en su Twitter.

Mientras el cantante y productor Tommy Torres expresó "Facundo Cabral más que música a mí me deja una filosofía de vida. Hay muchos cantautores inteligentes pero pocos sabios".

Entretanto, Ricardo Montaner lamentó el asesinato asegurando que esta noticia "enluta a todos los artistas del planeta". Montaner, nacido en Argentina y criado en Venezuela, expresó a través de Twitter su conmoción por el crimen y escribió: "No puedo creer lo de Facundo Cabral. Esta noticia nos enluta a todos los artistas del planeta. Hombre de palabra justa. Callaron al cantor".

*Murió por sus ideales: Rigoberta Menchú

La Premio Nobel de la Paz 1992, la dirigente indígena guatemalteca Rigoberta Menchú, derramó lágrimas al deplorar la trágica muerte del compositor e intérprete argentino Facundo Cabral. Sostuvo, en el sitio del atentado, que Cabral murió "por sus ideales", aunque no profundizó en los fundamentos de su apreciación.

"Es un crimen que causa horror. No dejo de pensar que fue asesinado por sus ideales porque no hay ninguna razón por la que fuera asesinado en Guatemala", dijo sobre Cabral, quien le cantó a la libertad, a la vida y fue un feroz crítico de las dictaduras militares y gobiernos autoritarios.

"No encuentro ninguna lógica de la muerte de Cabral aquí en Guatemala, él sólo vino a cantar", dijo Menchú, tras reiterar que el trovador, de 74 años, murió en este país centroamericano "por sus ideales", a manos "del fascismo".

Menchú acudió al lugar en que fue ultimado el artista, un transitado sector de la ciudad de Guatemala conocido como El Trébol, donde quedó la camioneta Range Rover perforada con numerosos disparos.

*El Indio Gasparino de Argentina:

"Fue mudo hasta los 9 años, analfabeto hasta los 14, enviudó trágicamente a los 40 y conoció a su padre a los 46. El más pagano de los predicadores (…) repasa su vida desde la habitación de hotel que eligió como última morada".

Facundo Cabral forjó una carrera musical que navegó entre la canción protesta, el compromiso social y la reflexión espiritual, con decenas de éxitos que le llevaron a recorrer los escenarios del mundo.

Cabral nació el 22 de mayo de 1937 en la ciudad bonaerense de La Plata y su primera infancia estuvo marcada por el abandono del hogar de su padre, Rodolfo, por lo que su madre, Sara, quedó a cargo de varios hijos y resolvió mudarse a Tierra del Fuego, en el extremo sur de Argentina.

A la edad de 9 años, escapó de su hogar y estuvo desaparecido cuatro meses. Su propósito inicial era llegar hasta Buenos Aires para conocer al entonces presidente argentino Juan Domingo Perón, ya que tenía la referencia de que el mandatario "le daba trabajo a los pobres".

Después de una larga travesía, transportado por diferentes personas, al llegar a la ciudad capital, un vendedor le dio la dirección de la Casa Rosada y al día siguiente Facundo Cabral, siendo apenas un niño, logró burlar el cerco policial alrededor del mandatario y su esposa, Eva Duarte y conversó con ambos.

Gracias a esta conversación, logró que su madre obtuviera empleo y el resto de la familia se trasladara a la ciudad de Tandil, donde trabajó en tareas rurales y tomó contacto con la música folclórica.

No obstante lo anterior, tuvo una infancia dura y desprotegida; se convirtió en un marginal al punto de ser encerrado en un reformatorio pues se había convertido en alcohólico desde casi su primera infancia.

Escapa y luego cae preso a los 14 años por su carácter violento. En la cárcel, un sacerdote jesuita fue quien le enseñó a leer y escribir, lo puso en contacto con la literatura universal y lo impulsó a realizar sus estudios de educación primaria y secundaria, los cuales llevó a cabo en tres años, en lugar de los doce que era el período normal en Argentina.

Un año antes de salir de la cárcel, Cabral escaparía de la prisión, aunque recibió ayuda del sacerdote. Conoció luego a Simón, un vagabundo que, según relató Cabral alguna vez, le hizo descubrir a Dios al recitarle el Sermón de la Montaña y, además, dar el empujón inicial a su carrera musical pues aquella experiencia le movió a componer su primera canción "Vuele bajo".

Con su guitarra al hombro, pocos años después, se mudó a la turística ciudad bonaerense de Mar del Plata, donde el dueño de un hotel le dio la oportunidad de cantar en público por primera vez.

El Indio Gasparino fue el nombre artístico que eligió para grabar sus primeros discos, sin mucha repercusión inicial, para adoptar luego su verdadero nombre.

En 1970 grabó No soy de aquí, ni soy de allá, uno de sus mayores éxitos musicales y que le dio fama internacional, al punto de compartir escenarios y estudios de grabación con artistas como Alberto Cortez, Julio Iglesias, Pedro Vargas y Neil Diamond, entre otros.

Influenciado en lo espiritual por Jesús, Gandhi y La Madre Teresa de Calcuta, en literatura por Jorge Luis Borges y Walt Whitman, imprimió a su vida un rumbo espiritual de observación constante a todo lo que le ocurría, no se conformó con lo que veía y su carrera como cantautor tomó el rumbo de la crítica social, sin abandonar su habitual sentido del humor. Y si bien se identificó con el anarquismo, nunca tuvo una participación militante.

Su obra se caracterizó por su mensaje espiritual y su tono de crítica social y protesta, rasgo éste último por el que se vio obligado a exiliarse en 1976, con el advenimiento de la dictadura militar que gobernó Argentina hasta 1983.

Desde México, su nuevo hogar, prosigue con su carrera musical y sus presentaciones en todo el mundo. Se estima que recorrió 159 países.

Ya consagrado, regresa en 1984 a Argentina, donde cosecha gran éxito con la venta de discos y llenos totales en sus conciertos.

A mediados de la década de los noventa se une a Alberto Cortez para el espectáculo Lo Cortez no quita lo Cabral, donde combinaron humor y poesía con los temas que dieron fama a ambos artistas.

En 1996, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco ) declaró a Cabral "Mensajero Mundial de la Paz" por su constante llamado a la paz y al amor.

Grabó decenas de discos, como No estás deprimido, estás distraído, Cantar sólo cantar y Cortezías y Cabralidades, éste último uno de los tanto junto a Cortez.

También escribió varios libros, una de decena de ellos editados, entre ellos Borges y yo, donde repasa sus diálogos con el célebre escritor argentino.

*BIOGRAFÍA

Facundo Cabral:

Nació: 22 de mayo de 1937

Origen: La Plata, Argentina

Murió: 9 de julio de 2011 (74 años)

Ocupación: Cantautor, Compositor, Productor

Género: Trova, Folklore, folk-rock, Baladas

Instrumento: Guitarra

Período de actividad 1959-2011

Discografía:

El Carnaval Del Mundo

Ferrocabral

Pateando nachos; en vivo en Estadio Chico, de Quilmes

Cabralgando, en vivo

Entre Dios y el Diablo

Hombre de siempre…

El profeta de Gibrhan

Gracias a la vida

Sentires

Reflexiones

Este es un nuevo día

El oficio de cantor

Secreto

Recuerdos de oro

Época de oro

Mi Vida con Waldo de los Ríos,

El Mundo Estaba Tranquilo Cuando Yo Nací,

No estás deprimido, estás distraído (2005, Audiolibro)

Cantar sólo cantar / Cabral sólo Cabral, volúmenes 1 y 2

Con Alberto Cortez Lo Cortez no quita lo Cabral, Vol. 1 en vivo (1994) ("No soy de aquí", juntos)

Cortezías y Cabralidades – Vol. I y II

Obra literaria:

Paraíso a la deriva

Conversaciones con Facundo Cabral

Mi Abuela y yo

Salmos

Borges y yo

Ayer soñé que podía y hoy puedo

Cuaderno de Facundo

No estás deprimido, estás distraído.

Los papeles de Cabral

Su último concierto: en el Teatro de los Héroes:

Dos rosas en una mesa, una copa de buen vino y su inseparable guitarra acompañaron al maestro Facundo Cabral en una noche bohemia que terminó con el público aplaudiéndole de pie y con ganas de seguir escuchándolo en un Teatro de los Héroes lleno hasta los bordes, apenas el pasado 31 de agosto, en lo que sería la última presentación del artista en Chihuahua.

Apenas iniciaba su gira en México, luego de presentarse el 28 y 29 de agosto en Monterrey, pero más de mil 200 chihuahuenses disfrutaron de casi dos horas de una amena charla en que el cantautor argentino demostró que, era cierto: no era de aquí ni de allá, sino de todas partes y perteneció a todos.

A pesar del cáncer que le aquejaba y de las tres operaciones a las que se sometió en mayo antepasado -"y de otras tantas anteriores, tengo el récord Guinness", bromeó aprovechando la ocasión-, Cabral conservó el buen humor y el deseo de compartir con quien lo escuchara su particular filosofía de la vida.

Puntual como pocos, apenas pasadas las nueve de la noche (hora de la presentación) inició una larga plática antes de la primera canción. Dijo, entre otras cosas, que cree en los milagros porque cada día lo levanta la voluntad.

Entre canción y canción hizo un recuento de su vida, habló de su madre, del abandono de su padre, de sus hermanos, de sus encuentros con Zabludovsky, que sin conocerlo le ofreció ocho minutos en su noticiero y terminó dándole 24; con la Madre Teresa, quien dijo de él que no era un cantante, sino un testigo; con Eva Perón, que al conocerlo agradeció que por fin había conocido alguien que pedía trabajo en vez de limosna, y dándoselo le salvó la vida.

"Yo vengo de todo el mundo", "Si el hombre es lo que ama", "Los ejes de mi carreta" de Atahualpa Yupanqui, "Me dijeron por ahí", "Éste es un nuevo día", fueron algunas de las melodías que entregó a los asistentes al teatro, a quienes no perdió la oportunidad de presentarles su nuevo disco y ofrecerles autografiárselos al final, pues advirtió que disfrutaba firmando, porque siempre había quien le contara algo y escuchaba cosas maravillosas.

Y así lo hizo, luego de su última interpretación, la tan esperada "No soy de aquí ni soy de allá", en la que un coro le acompañó cantando bajo y dulcemente, Facundo Cabral se despidió del público chihuahuense, pero sólo para prepararse a recibir a una larga, larga fila de seguidores que ansiaban guardar en sus recuerdos una firma y unas palabras del mensajero de la paz. Nadie imaginaba, en ese momento, que esa despedida sería la definitiva.

"En Chihuahua siempre me pasaron cosas bonitas":

Su última entrevista para El Heraldo:

Previo al concierto que ofreció ese ya inolvidable 31 de agosto en el Teatro de los Héroes, el cantautor argentino habló en exclusiva para El Heraldo de Chihuahua, sobre temas tan interesantes como sus recuerdos de la Sierra Tarahumara y el llamado sueño bolivariano.

A 42 años de haber escrito "No soy de aquí, ni soy de allá", Facundo Cabral afirmó que esa canción estaba más viva que nunca. "En 1968 la escribí (…) hace 42 años ya y está más viva que nunca. En ese año se vivía la revolución en mi país, todos teníamos la ilusión de cambiar el mundo, de cantar por todos lados. Me ha dejado todo lo que te imagines", dijo emocionado al iniciar la charla.

Manifestó orgullo porque la pieza se había cantado en muchos países, por mucha gente. "A mí difícilmente me tocan en la radio y muy pocas veces aparezco en televisión. El primero que la cantó fue Alberto Cortez y fue un éxito. La han cantado Vicente Fernández, Lola Flores, Marco Antonio Muñiz (…) hasta Homero Simpson la ha cantado", contó, divertido.

Aseguró que hasta hace cinco o siete años había cerca de 700 versiones en 27 lenguas. "Una vez en Chihuahua, hace unos años, estuve en la Sierra Tarahumara. Fui a Guachochi en avioneta y cuando llegamos había un grupo de tarahumaras cantándola en su lengua. Me puse a llorar como un niño, fue tan lindo. Hasta dónde puede llevar la vida una canción. Me dije ‘caramba, si me muero ahora, qué buen momento’", relató conmovido al recordar.

Afirmó asimismo que aprendió de los tarahumaras muchas cosas extraordinarias. Recordó, por ejemplo, al tarahumara que le dijo que si las armas fueran necesarias, hubiéramos nacido con ellas. "Uno no nace para matar", se lamentó en aquella ocasión al respecto.

También le llamó la atención y alabó el peculiar sentido de la propiedad de los rarámuris.

Sobre la situación que se vive actualmente en Chihuahua, en aquella ocasión justificó no tener aval como para hablar de cosas de las que no tenía noticia. No obstante, opinó que "la estupidez está globalizada, el ser humano va a terminar destruyéndose. La violencia está instalada en todo el mundo, en mi Buenos Aires, en Chicago. La sociedad está enferma. La violencia ha aumentado, hay secuestros, asesinatos a diario, droga. Pero esto va a cambiar, porque al ser humano se debe ir puliendo y purificando".

"Hay gente bastante estúpida que se deja pisar, pero yo no vivo con esa gente", aseveró y agregó que "hace muchos años que aprendí a esquivar a los pen… vivo con gente sana".

En aquella ocasión, Cabral había titulado a su gira "Vive la Independencia", declarando que México siempre había sido su segunda patria. "Me gusta, me toca. Dos siglos de independencia no está mal, me gusta venir a festejar con esta gira de 20 conciertos por 19 ciudades (repitió en Monterrey)", dijo al respecto del bicentenario, agregando que a esta plaza le tenía un especial cariño, mostrándose animado de venir al Teatro de los Héroes. "Me encanta el nombre (del inmueble), le tengo cariño. En Chihuahua siempre me pasaron cosas bonitas", señaló.

Recordó que en 1972 conoció a doña Luz Corral de Villa en la Quinta Luz y describió a la perfección el auto donde mataron al general. Asimismo, cómo algunos de los veteranos Dorados de Villa lo invitaron a Columbus, le prestaron ropa y fue a caballo con ellos y también la manera en que en Parral conoció a don Octavio, quien fuera chofer del Centauro del Norte y que se salvó de morir en la emboscada porque estaba enfermo y era otro el que conducía el automóvil.

"Cuando voy a Chihuahua, voy con alegría, tengo una buena relación de 38 años", manifestó.

Habló también en esa ocasión del famoso sueño bolivariano, ese anhelo de Simón Bolívar de ver una América unida en un solo bloque. "Ya lo es para mí, para los que vivimos como yo, que ando por todo el continente, que es uno solo, aunque habrá todo tipo de problemas Yo no sé cuál es la diferencia. Yo voy a Guayaquil, voy a Nicaragua, vengo a México, voy a Dominicana, a Puerto Rico, y para mí es ya lo mismo", señaló.

"Vamos a ir más allá", se atrevió a vaticinar. "La más grande noticia la trajo Jesús: Uno solo es el Padre. La Humanidad es una sola familia. Habitamos un solo país llamado Tierra. A mí me cambió la vida esa noticia a los 17 años, me hizo rico, ciudadano del planeta".

En este sentido afirmó que la Madre Teresa, Beethoven, Tamayo, Siqueiros, son patrimonio de la Humanidad.

Para los jóvenes chihuahuenses, Facundo Cabral aconsejó "que hagan lo que aman, es el secreto de la plenitud. Al que ama lo que hace la va bien hasta cuando le va mal. Está condenado a la victoria. El que trabaja por obligación no favorece a la Humanidad. El que trabaja en lo que sea no tiene plenitud. La vida es para los valientes", concluyó.