Bolivia puede convertirse de país exportador de gas a importador de este energético si no se siguen políticas de incentivos de exploración para el sector privado, tal como sucedió en Argentina, sostiene el analista en temas de energía, Álvaro Ríos.
Ríos rememoró que el sureño país era un gran exportador de hidrocarburos en el siglo pasado, pero después comenzó a importar en grandes cantidades los combustibles fósiles y ahora necesita de la importación para abastecer a su mercado interno.
“Si Bolivia sigue el mismo camino de no incentivar la exploración y no da los mecanismos para que el sector privado pueda invertir en Bolivia, vamos a correr con la misma suerte que Argentina, que primero se quede sin mercados de exportación y luego habrá un déficit para cubrir la demanda de nuestro mercado interno”, destacó.
El experto indicó que tanto Bolivia como Argentina tienen grandes recursos de combustibles fósiles, comparten la misma cuenca y que Argentina no es que no tiene gas, sino que sus políticas no han sido bien implementadas.
“El análisis que deberíamos hacer es Argentina importa gas entre 9 y 16 dólares el millón de BTU y remunera a su producción interna, a los que producen gas, a dos dólares, entonces no están incentivando la producción interna sino están incentivando o subsidiando la importación. Ese panorama no ocurre en Bolivia, porque su contexto es un poco diferente”, concluyó
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La Estrella del Oriente / HidrocarburosBolivia.com