Jimmy Ortiz Saucedo
“Falta de luz y agua preocupó en la primera jornada de cortes.- Apagones. Debido a los trabajos de mantenimiento que se están ejecutando en la línea de alta tensión de Carrasco-Arboleda, Santa Cruz tuvo que soportar el corte del suministro eléctrico durante más de siete horas”. (La Estrella del Oriente)
Es impresionante la falta de capacidad administrativa del gobierno del Presidente Morales. Y no me refiero sólo a las grandes necesidades del país, me refiero a cosas tan básicas como la energía eléctrica y el agua.
¿Será que es ser muy exigente pedir agua y luz? Presidente Morales soluciones los problemas elementales de la gente, administre el país, haga gestión pública, para eso fue elegido.
La gente quiere vivir bien y sin energía no se puede.
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Temas que en otros países del vecindario sudamericano fueron solucionados al principio del siglo XX, para nosotros siguen siendo un problema.
La falta de energía eléctrica es una cosa que se la veía venir hace más de tres años. La CRE lo manifestó públicamente. El desequilibrio entre la oferta y la demanda de electricidad, era conocido por los técnicos del sector y por la ciudadanía.
Seguimos los pasos de la Venezuela chavista, donde la gente se tiene que bañarse en 3 minutos.
La brigada parlamentaria cruceña lo había reclamado. Y no me refiero lógicamente a la brigada parlamentaria actual, a la cabeza de Mauro Peña, porque esta no existe en la práctica. Y cuando hace o dice algo, es sólo para ser una caja de resonancia del centralismo, o para defender a la wiphala altiplánica. El pueblo cruceño y su desgracia le importa un pito, el solo quiere estar bien con el jefazo. En la practica la Brigada esta desactivada, en neutro, con freno de mano y guinche. Para eso la tomo el servil Mario Peña.
El principal problema de este gobierno es que no tiene políticas de desarrollo económico. Cree que lo social esta desligado de lo económico. Piensa que hacer política es solo hacer discursos, andar haciendo campaña todos los días, judicializar la política, perseguir a los adversarios y amedrentar a los medios de comunicación.
Bolivia es un país sin políticas de estado. Los cortes de luz solo muestran la falta de una política energética. El brutal crecimiento de la cadena coca-cocaína y el aumento desmesurado de la inseguridad ciudadana, muestran la falta de una política antidroga. La caída de la producción de alimentos, muestra la falta de políticas de incentivo el sector agropecuario y así por delante.
Y para complemento de lo anterior, se ha desinstitucionalizado lo poco que de institucional que existía. La Democracia la primera de ellas, el Banco Central, la Superintendencia de Bancos, la Policía, las Fuerzas Armadas, Impuestos Internos, el Poder Judicial, Migración, Aduana, YPFB y otros. Hoy los Santos Ramírez son decenas.
Bolivia es un país a la deriva, un país fallido, que no ha sabido formar un verdadero Estado nacional a casi 200 años de su fundación. Y durante los últimos 6 años que gobierna el Presidente Morales, esta tendencia se ha acentuado notoriamente.
No me cansaré de repetir: Necesitamos una nueva clase política meritocrática, que sea amada y respetada por su pueblo. Necesitamos un liderazgo patriótico con grandeza de espíritu, que busque por encima de los intereses sectoriales, ideológicos o raciales, el bienestar de la Nación en su conjunto. Un liderazgo que nos haga sentir bolivianos a todos. Un liderazgo integrador.
Ya basta de mediocres gobernando Bolivia. Ya basta de Melgarejos, Gonis y Evos.
Precisamos reivindicar "la noble carrera de la política", como una profesión de servicio público honesto, sabio y diligente. Solo así el país aspirará a salir del Tercer Mundo y dejar de ser el país fallido que somos.