Al Jefe de Estado también le diagnosticaron una mala alimentación. El Presidente fue internado el pasado viernes 2 de marzo, según se dijo en su momento, para “chequeos rutinarios”. Antes fue operado de la rodilla y tabique de nariz.
Página Siete / Coroico
El presidente Morales, ayer, en rueda de prensa. APG
El presidente, Evo Morales, admitió ayer que su internación se debió a mareos, cansancio y desgaste físico. Además le diagnosticaron una mala alimentación.
El Jefe de Estado contó que sintió mareos desde el miércoles 29 de febrero, hecho que le llamó la atención y decidió acudir a la Clínica los Olivos, de Cochabamba, donde el viernes 2 de marzo en horas de la noche fue internado y le realizaron varios exámenes como electrocardiograma y medición de la presión arterial, entre otros estudios.
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“Al día siguiente (sábado) me dicen los médicos no tiene nada Presidente, pero sí es cansancio, mala alimentación y tal vez desgaste físico”, informó Morales en conferencia de prensa realizada ayer en el municipio de Coroico donde dirige la reunión de su gabinete ampliado.
También relató que el miércoles, tras cumplir varias actividades en la población de Poco Poco (Potosí), llegó a la ciudad de La Paz y cuando realizaba preparación física “al momento de levantarme me dio mareos; pensé que era momentáneo y al día siguiente, también me levanto con mareos”, dijo el Presidente.
Pese a su situación, el jueves, Morales cumplió con otra agenda intensa en Okinawa (Santa Cruz), ahí también sintió problemas al jugar fútbol de salón, especialmente al momento de correr pese a que lo habría hecho con limitaciones. El mismo día debía asistir a otras dos actividades organizadas en el trópico del departamento de Cochabamba.
La autoridad admitió que probablemente la excesiva actividad deportiva, además de la preparación física que realiza en la residencia presidencial le “agotó físicamente”.
Contó que no sentía ningún dolor, pero sí le llamaron la atención los mareos, motivo por el que los médicos de la Clínica los Olivos, pese a no encontrar ningún problema, le recomendaron quedarse esa noche para realizar “un profundo análisis”.
El Mandatario tenía en su agenda, el sábado 3 y 4 de marzo, asistir a la entrega de varias obras en la ciudad de El Alto, municipio que vivía la víspera a su aniversario de fundación.
La misión le fue delegada al vicepresidente, Álvaro García Linera, quien informó del estado del Jefe de Estado, aunque atribuyó a un “chequeo rutinario” la hospitalización y realización de un riguroso examen médico.
Morales tiene en su agenda actividades que comienzan en la madrugada y terminan por la noche como reuniones, viajes aéreos, entrega de obras, partidos de fútbol y otros.
Ayer mismo disputó un partido de fútbol en Coroico al igual que en otras poblaciones. Cuando hace entrega de canchas de pasto sintético juega un partido de fútbol con los pobladores.
Ésta no es la primera vez en que la salud de Morales decae; el año pasado fue operado de la rodilla por una lesión y anteriormente también fue sometido a cirugía por un desvío de tabique nasal.
La salud de Morales
Cirugías. El presidente Evo Morales fue sometido a otras cirugías: fue operado por médicos cubanos para corregir la desviación del tabique nasal que le ocasionó dolorosas molestias desde el pasado año.
Intervención. También fue operado de su rodilla izquierda y sometido a un procedimiento quirúrgico por vía artroscópica debido a que por su intensa actividad diaria y deportiva presentaba molestias en la región anterior de su rodilla izquierda.
Actividad. El Jefe de Estado cumple intensa actividad de gestión pública y deportiva.