Digcoin solo cuenta con 4 agentes para controlar el ingreso de miles de taques de coca legal e ilegal en Santa Cruz. Cultivos de coca llegan a un sitio ‘sagrado’ para los guarayos.
Digcoin admite que parte de coca de Santa Cruz va al narcotráfico
El Deber
Almacenada. Unas 100.000 libras de coca hay en Digcoin para ser quemadas
Solo cuatro agentes tiene la Dirección General de la Hoja de Coca e Industrialización (Digcoin) para controlar el ingreso de la coca legal e ilegal en Santa Cruz, según fuentes oficiales.
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Manuel Manzaneda, director de la repartición gubernamental, informó de que dos inspectores trabajan en un puesto de control de Puerto Abaroa, en el municipio de Yapacaní; uno lo hace en Montero y otro en la localidad de Los Troncos.
“Nos falta personal. Solo tenemos cuatro agentes. ¿Usted cree que con cuatro personas se va a combatir el ingreso? La coca ilegal entra a cuantas fábricas se han encontrado en San Germán, Nuevo Horizonte, Choré, y otros lugares”, dijo Manzaneda.
La autoridad explicó que al departamento de Santa Cruz entran 1.000 taques de coca legal al día (cada taque tiene 50 libras). Admitió que parte de la hoja que ingresa de manera legítima también se desvía al narcotráfico.
“El último control que tenemos es el kilómetro 40 de Yapacaní. No contamos con personal para controlar en las otras poblaciones intermedias. Por lo tanto necesitamos más efectivos y vehículos para patrullar”, indicó el director.
Manzaneda reconoció que los productores de coca y los que la transportan introducen a Santa Cruz más coca ilegal que la que es avalada por Digcoin. Añadió sin reparos que dicha materia prima se va directo al narcotráfico. En este año no se ha decomisado coca de uso clandestino. / BV
Hallan plantación de coca en un sitio ‘sagrado’ para los guarayos
Corpus Chané, corregidor de la comunidad Cerro Grande, 45 kilómetros de Ascensión (Guarayos), en la carretera a Beni, denunció la existencia de una plantación de coca en las faldas del mítico cerro del mismo nombre, cuyo sitio es considerado sagrado por los guarayos, porque, según la creencia, la cima del coloso sirvió de refugio en el diluvio universal.
La autoridad comunal no especificó la superficie del sembradío, aunque aseguró que es “medio grande” y que en los alrededores había turriles y bidones con olor a combustible.
La noticia fue corroborada por el exsambleísta y también exalcalde de Urubichá José Urañavi.
Conocida la información, indígenas y campesinos expresaron su indignación, al indicar que eso es una falta de respeto o un sacrilegio para el pueblo por lo que exigen a las autoridades la destrucción de la plantación y castigo a los propietarios./DA. El Deber