El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas autorizó el sábado por unanimidad el despliegue de hasta 30 observadores no armados en Siria para vigilar el frágil alto al fuego del país y dijo que estudiaría tomar «otras acciones» si Damasco no detiene la violencia.Rusia y China y los otros 13 miembros del Consejo votaron a favor de una resolución redactada por naciones árabes y de Occidente. Sin embargo, el embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, destacó que había límites al tipo de acciones que Moscú podría apoyar.»Por respeto a la soberanía siria hemos sido cautelosos frente a intentos destructivos de interferencia externa o de imponer cualquier tipo de soluciones ilusorias», sostuvo.La oposición denunció el sábado la muerte de al menos seis personas en todo el país y activistas también informaron del primer bombardeo de la ciudad de Homs por parte de fuerzas leales al presidente Bashar el Asad desde que entró en vigor el jueves el alto el fuego patrocinado por la ONU y la Liga Árabe.Reuters