Goles son amores y no buenas razones, y Guabirá anotó dos para vencer a un Wilstermann que se insinuaba superior, aunque terminó vencido por el azucarero (2-0), en el otro partido del indirecto jugado ayer en el estadio Gilberto Parada de Montero. Los equipos ligueros empezaron con buen pie esta serie, en la que están en juego dos lugares en la próxima temporada de la Liga, pero en esta llave no parece nada resuelto, a diferencia de lo que ocurre en la otra, donde La Paz FC se llevó por delante a Destroyers (6-1) dando señales de que el “canario” no tendrá chance para ascender a la máxima categoría.
En Montero, Wilster comenzó bien, pero terminó mal. Así se resume lo ocurrido en este duelo rojo que favoreció a Guabirá por los golpes precisos que asestó, uno en cada periodo, y porque no le dio chance a su famoso adversario para reaccionar. El aviador dejó escapar su “cuarto de hora” de los primeros minutos del partido. Dominó desde el comienzo, se mostró como un equipo consistente, pero le faltó la puntada final, y como no tuvo talla en ese orden, a la postre lo pagó caro. Guabirá, apretado por un rival ciertamente peligroso, se dio modos para hacer daño y apeló sobre todo a los rápidos ingresos de Jiménez por la izquierda, por donde más dificultades para marcar tuvo la visita. No había hecho grandes merecimientos el azucarero, sin embargo consiguió abrir la cuenta a los 30 minutos mediante la fórmula ya anotada: el viaje de Jiménez y el centro preciso para que Alexis Bravo definiera con precisión de cabeza para vencer al arquero Mauro Machado.
Fue a partir de ahí que Guabirá pasó a ser protagonista de primera línea, se dio cuenta de que el rival no era tan pintado como se creía, y hasta estuvo cerca de anotar el segundo tanto, pero esta vez Jiménez optó por definir por su cuenta, aunque sin ángulo, de manera que la pelota pegó en la parte externa del arco. En la segunda parte el conjunto de Montero tuvo la virtud de salir a buscar otro tanto para que su victoria no corriera riesgo, lo consiguió a través de Cuéllar a los 14 minutos.
Pero fue un paseo del delantero, ya que entró en el área y mientras dos zagueros pensaban aún en la cobertura, él se acomodó y de zurda mandó un fuerte disparo, inatajable para Machado. Con el 2-0 fue suficiente para que Guabirá salvara su posición como local defendiendo su lugar en la Liga. Wilster no tuvo argumentos para buscar al menos empatar e hizo pensar en que su aspiración de volver a la máxima categoría puede truncarse si no hace algunos ajustes urgentes. El aviador está obligado a ganar para forzar a un tercer encuentro. Por ahora, Guabirá ha hecho sus labores.
Fuente: Unitel.
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