Habló el narco-general

Era cuestión de tiempo para que el general René Sanabria, preso en los Estados Unidos, comenzara a revelar lo que sabe sobre la penetración del narcotráfico en altas esferas estatales de Bolivia. El momento de comenzar a destejer la madeja ha llegado, en medio de una profunda crisis policial, coyuntura que Sanabria parece haber juzgado propicia para empezar a descubrir la verdad.Desde la cárcel y por medio de una carta dirigida a medios de Bolivia y EEUU, el general reveló que el gobierno de Evo Morales “protege a funcionarios públicos narcos”, señalando que un informe elaborado cuando dirigía el Centro de Inteligencia del Ministerio de Gobierno (CIGEIN), con nombres de autoridades involucradas en narcotráfico, desapareció durante las gestiones del ex ministro Sacha Llorenti y el ex viceministro Marcos Farfán.Es apenas la punta del iceberg de lo que, con seguridad, vendrá. Desde el gobierno se impone el mutismo total, pero mientras los voceros del oficialismo se niegan a declarar sobre el caso, el vicepresidente habla de una “dictadura mediática”, en un nuevo intento de hostigamiento a la prensa que quizás busque acallar la cobertura a la misiva del narco-general.Es probable que en la decisión de Sanabria de hablar hayan pesado los ejemplos de Aponte Aponte y Velásquez Albarai, los ex magistrados venezolanos que comenzaron a descorrer el velo sobre la narcotización del chavismo.Al mismo tiempo que Sanabria habla, el desplazado ex comandante nacional de policía, general Jorge Santiesteban, anuncia su intención de decir “su verdad” sobre el caso Unipol. ¿Se atreverá también a hablar sobre el caso Rozsa?Las verdad nos hará libres…[email protected]