Dirigentes políticos y cívicos de la provincia Germán Busch advirtieron hoy que la ejecución de la segunda boleta de garantía a la Jindal, dispuesta por el gobierno, podría precipitar la crisis del proyecto y acabar con las esperanzas de desarrollo del sudeste boliviano.“El gobierno de Evo Morales está expulsando inversiones, lo que genera destrucción de empleos”, dijo el diputado Luis Felipe Dorado (Convergencia Nacional). El legislador se declaró sorprendido por la actitud del presidente de la Empresa Siderúrgica Mutún (ESM), Sergio Alandia, quien “hace unos días emitió una resolución por la cual que se iba a dar un plazo de 60 a 90 días para arreglar los problemas que existían”, pero que sin embargo procedió al cobro de la mencionada boleta.“¿Qué va a pasar con los más de 500 empleos que hay en la región, entre directos e indirectos? ¿Será que el gobierno le va a dar trabajo a toda esa gente?”, se preguntó.Dorado señaló que este “Es un aplazo del presidente Evo Morales, quien dijo que El Mutún era su proyecto estrella, donde se iban a invertir 2.100 millones de dólares. ¿Cómo va a llegar el presidente a Puerto Suárez, si más de siete veces inauguró este proyecto y ahora se ha caído?”.El dirigente cívico de Puerto Suárez, Antonio Tudela, indicó que “Hay irresponsabilidad de las dos partes (gobierno y Jindal)” y anunció que la provincia Germán Busch iniciará medidas de presión.“Habrá bloqueos, huelgas y las medidas necesarias, porque sólo con presión este gobierno reacciona”, agregó.