Rosmery, una de las jovencitas desaparecidas, huyó de sus captores y se encuentra en su casa

La Paz. Rosmery Patricia Aranda Ticona, de 14 años, fue encontrada ayer en horas de la tarde. La adolescente está siendo sometida a exámenes forenses y tratada con psicólogos. Los detalles de su desaparición aún no fueron revelados. Es la misma adolescente que hace unos días se comunicó con sus familiares para decir que estaba oculta en El Alto y que iba a escapar junto a otras jovencitas.

“Ayer la hemos encontrado, está ahorita con el psicólogo. Se encuentra bien, pero está rara y callada, no quiere decir nada”, informó a Oxígeno la hermana de la víctima, Francisca Aranda.

imageLa familia de Rosmery informó, hace días, a los medios de comunicación que ella había logrado comunicarse con su madre. “Sólo dijo: no sé dónde estoy, nos tienen encerradas, somos varias niñas. En la noche trataremos de escapar”.



Rosmery desapareció el pasado 4 de junio cuando se dirigía a su Colegio. Sus familiares señalaron que salió de su casa de la localidad Tambillo, provincia Los Andes, aproximadamente a la 8.45 y no volvieron a saber más de ella hasta ayer.

La hermana de la adolescente indicó que no pueden detallar todavía de lo que pasó con Rosmery. La FELCC se ha hecho cargo del tema. "Nos dijeron que no hablemos todavía, ni siquiera a nosotros nos ha dicho nada, están averiguando”.

Asimismo, agradeció a los medios de comunicación por “toda la ayuda y difusión de la desaparición de mi hermana. Que Dios se los pague”.

Con esta noticia se espera que se puedan encontrar a las otras personas desaparecidas. La familia de Zarlet Clavijo Martínez, que también desapareció el pasado 4 de junio organiza este viernes a las 18.00 en la Plaza Avaroa, una vigilia de solidaridad junto a los otros familiares que aún no encontraron a sus hijos.

El encuentro tiene tres objetivos y los asistentes deben acudir al lugar con una vela blanca, como distintito del evento.

"Estamos viendo la forma de reunir a los familiares de personas de desaparecidas y la población solidaria con tres objetivos:

Primero para intercambiar datos sobre los supuestos lugares en los que podrían estar nuestros hijos; segundo vemos la necesidad de crear una organización o institución que aglutine y atienda este tipo de casos, que no están centralizados en ningún lado, y tercero para presionar a las autoridades para que actúen rápidamente y los casos no se queden sólo en cifras", informó Marcela Martínez, madre de Zarlet, al periódico digital Oxígeno.

La Paz, 15 de junio (Oxígeno).