Líderes de opinión hacen un balance de la concentración de Costas


“Primera impresión de lo visto en tevé: No vi multitud. Notoria la ausencia de nuevos aliados del MAS (Percy & Cia, empresarios, Uagrm) y opositores al MAS, pero ‘abandonados’ por Costas (concejales disidentes). Segunda impresión: la desilusión pudo más que el temor de otro golpe antidemocrático del MAS. Tercera impresión: nada como para celebrar. Todo lo contrario: a prepararse, que vienen horas difíciles. Y no solo para Costas”. Con estas palabras, la periodista Maggy Talavera, directora del Semanario Uno, ensayaba un balance inicial de la concentración realizada en la Plaza 24 de Septiembre en apoyo al gobernador Rubén Costas.Para el empresario Alfredo Leigue, “Hoy tuvimos un suceso de masas en la plaza principal. Pero no un hecho político. Un conjunto de enunciados pero no un desenlace propositivo de resistencia. Veremos que sucede en el futuro inmediato. Espero equivocarme. A no ser que el hecho político hubiese sido el lanzamiento de una candidatura nacional, tema para el que no creo que hubiese asistido la gente con su bandera”.El analista Emilio Martínez considera que la cuantificación de la asistencia a la concentración es de doble filo: “Veinticinco mil personas es un número importante, pero al mismo tiempo estamos hablando de sólo el 2,5% de la gente movilizada en el cabildo del millón. Lo que equivale a decir que el 97,5% de los autonomistas se quedaron en casa, inconformes con la conducción caudillista del gobernador”.Horas antes del acto, el ideólogo del Estatuto cruceño, Juan Carlos Urenda, escribía en su muro de Facebook: “Las paradojas de la vida. Por la autonomía, tenemos que apoyar a los que en los dos últimos años abandonaron la autonomía”.También previa al mitin fue la crítica más dura, a cargo del integrante del Directorio del Comité Pro Santa Cruz, Víctor Hugo Velasco, quien dijo que “los cabildos no son para intereses personales” y consideró “un error político rendirle culto a quien debilitó a la autonomía, a quien fue su eslabón débil”.