Municipio. El presidente del legislativo edil debe convocar una sesión con dos días de anticipación. No se define la fecha. Los dos frentes se disputan la vicepresidencia.
Pugna. Los concejales ‘disidentes’ insisten en relegir a su directiva, presidida por Óscar Vargas y por Arminda Velásquez
El Deber
El fallo judicial que anuló a la directiva paralela elegida por los concejales disidentes y que restó validez a las reuniones que sostuvieron desde el 7 de junio significa dos meses ‘muertos’ para el órgano edil. Obras paralizadas y ejecución de otras sin fiscalización son los perjuicios que derivaron del conflicto, según municipalistas y politólogos, que sugieren solucionar la crisis con urgencia.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
Freddy Soruco, del MAS, que fue ratificado por la justicia como presidente interino del Concejo Municipal, anunció que esta semana convocará una sesión para elegir la nueva directiva. Los ediles deben continuar con la audiencia que está en cuarto intermedio desde el 7 de junio.
Para el municipalista Carlos Hugo Molina es preocupante la falta de solución, ya que 60 días se traducen en $us 60 millones que han sido administrados sin ningún tipo de fiscalización. Asimismo, resaltó que algunos contratos que requieren el tratamiento del Concejo están paralizados.
Ante el problema, el politólogo Róger Tuero advierte una falta de responsabilidad política de algunos ediles que han puesto en riesgo el normal funcionamiento de la institución más importante de la ciudad, que es el municipio.
Ambos profesionales consideran que se debe reestablecer la sesión que fue declarada en cuarto intermedio por Soruco y elegir la nueva directiva, de acuerdo con la norma. Este es un punto sensible debido a que los seis ‘disidentes’ insisten en ratificar a la directiva en la que Óscar Vargas obtuvo la presidencia, Arminda Velásquez la vicepresidencia y Manuel Saavedra la secretaría.
Sobre ello, el opositor Saúl Ávalos advirtió que solo si se respeta la minoría para elegir al vicepresidente tendrán al Concejo funcionando con normalidad. “Al parecer la mayoría está dispuesta a repetir la ilegalidad. Me pregunto si no lo hacen a propósito, ya que son de la misma agrupación del alcalde para que el presupuesto se siga ejecutando sin control”, dijo.
Pero Yaninne Parada, disidente de Santa Cruz Para Todos, insistió en que su colega disidente del MAS Arminda Velásquez representa la minoría, y por ello insistirán en repetir la fórmula. Anunció que al normalizarse sus funciones solicitarán informes sobre los contratos que no han pasado por el Concejo, como el que se firmó el 2 de agosto para el entierro sanitario de Normandía.
Al respecto, el exconcejal Wilmar Stelzer advirtió que las obras que se ejecutan sin la aprobación de los ediles pueden ser utilizadas para hacer ‘maldades’ posteriores. “Se trata de defenestrar a concejales para meter a otros predispuestos a hacer una cooperación directa con el Ejecutivo nacional”, señaló Stelzer.
Para saber
– 7 de marzo. Siete concejales votaron a favor de la suspensión de Desirée Bravo contra tres que querían su continuidad. Freddy Soruco asumió como presidente interino del organismo legislativo.
– 4 de junio. Soruco convocó una sesión para elegir una nueva directiva.
– 7 junio. Se instaló la sesión con los 11 ediles, pero luego se ordenó cuarto intermedio. Los disidentes la desconocieron y eligieron su directiva. Soruco planteó un amparo constitucional, el cual ganó.
– 21 julio. El Tribunal de Garantías anuló a la directiva de Vargas.