Presidente Evo Morales se convirtió en un “monstruo”, afirma columnista


“…lo que hizo Evo el domingo pasado es una muestra del monstruo en el que se ha ido convirtiendo gracias al ejercicio del poder y al entorno adulador y rastrero que, estoy seguro, asfixia todo lo bueno que pudiera haber en él”, dice el columnista Agustín Echalar Ascarrunz.

Un columnista afirma que el presidente Evo Morales se convirtió en un “monstruo”

imageERBOL.- El operador de turismo Agustín Echalar Ascarrunz, en su columna publicada por el periódico Página Siete en su edición de este domingo, afirmó que el presidente Evo Morales se convirtió en un “monstruo” gracias al ejercicio del poder y al entorno adulador.

“…me parece absurdo responsabilizar a un ministro de la falta de agua en un establecimiento que esté bajo su tuición; creo que lo que hizo Evo el domingo pasado fue un acto irracional, y una muestra del monstruo en el que se ha ido convirtiendo gracias al ejercicio del poder y al entorno adulador y rastrero que, estoy seguro, asfixia todo lo bueno que pudiera haber en él”, asevera el columnista en referencia al pedido público de renuncia que hiciera el Jefe de Estado en el aeródromo de Uyuni al extitular de la cartera de Medio Ambiente y Agua, Felipe Quispe Quenta.



El domingo pasado, indica la publicación, cuando el señor Presidente llegó a Uyuni y se percató de que no había agua en el recientemente construido aeropuerto “internacional”, se hizo dar una rabieta de Dios y señor mío, y terminó exigiendo la renuncia del ministro de Aguas y Medio Ambiente.

Parece ser que la falta de agua, sostiene el columnista, se debió a que ésta se congeló en las cañerías debido a las bajas temperaturas, algo que sucede muy a menudo en todo el altiplano boliviano, pero eso no fue una razón valedera para el líder.

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

“La cabeza de su ministro rodó, y éste fue humillado públicamente hasta el cansancio, claro que en parte fue por su culpa, ¿quién le manda a presentarse en Palacio para la posesión de su sucesor? He sentido vergüenza ajena por el pobrecito, y mucha pena por sus hijos, que no deben estarla pasando muy bien en la escuela gracias al aspaventoso despido”, agrega.

“Tengo sentimientos encontrados respecto a la actitud del líder espiritual de los bolivianos, por un lado denota una prepotencia sin límites, un mensaje a sus ministros de que él es su dueño y señor en forma absoluta, que puede quitarles su pega y su dignidad el rato menos pensado, y aunque sea culpa del viento o del invierno”, manifiesta Echalar.

Por el otro lado, señala el columnista, es un mensaje que uno quisiera oír, que si el Primer Mandatario se entera de una irregularidad, de que algo está mal hecho, de que algo debe ser solucionado, de que si hay negligencia de las autoridades locales, los problemas serán resueltos y los culpables serán castigados y humillados.