Evadas en Nueva York

onu En las entrevistas previas a su alocución ante la Asamblea General de la ONU, el presidente Evo Morales se despachó varias de sus acostumbradas “perlas” discursivas, que en los últimos tiempos han recibido el nombre de “evadas”.

Ante una agencia internacional de prensa, Morales defendió la memoria del dictador libio Muammar Gadafi, diciendo que Estados Unidos debió haber condenado la muerte del autócrata, de la misma forma en que lo hizo con el asesinato del diplomático Chris Stevens.

Aunque consideramos que Gadafi no debió haber sido ejecutado, sino llevado ante la Corte Penal Internacional para responder por miles de crímenes, lo cierto es que parece desafortunado comparar ambos casos: la muerte de un dictador sangriento en una guerra civil, en buena medida desatada por su intransigencia, con la de un diplomático a raíz de un video en el que no tuvo participación alguna.



En otros temas, Morales volvió a la carga contra Paraguay, calificando de “golpe congresal” al impeachment parlamentario contra el ex presidente Fernando Lugo, demostrando desconocimiento de las reglas constitucionales del vecino país y cierta voluntad de injerencia en los asuntos internos.

También reiteró su oposición al embargo norteamericano contra la dictadura cubana y saludó las negociaciones entre el gobierno colombiano y las narcoterroristas FARC.

En suma, Morales se convirtió en portavoz de un guión continental probablemente surgido de algún think tank del ALBA, en función de los intereses de gobiernos y fuerzas políticas que fungen de “hermanos mayores” de su régimen…

[email protected]