Hallan fábricas de droga y pistas en zona de Ichilo

Pesquisa. En 2 días de acciones en Nuevo Horizonte y San Germán.

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Hallazgo. El jefe de Umopar, Edward Barrientos, en la mitad de la pista clandestina con rejilla de control de operaciones



El Deber

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Una sorpresiva movilización de efectivos de Umopar y de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) tomó prácticamente durante dos días las poblaciones de Nuevo Horizonte y de San Germán y se logró descubrir fábricas de cocaína, se detuvo a varias personas y se incautó de coca, precursores químicos y de dinero.

Las acciones se desarrollaron el lunes y martes después de que el miércoles de la semana pasada en Nuevo Horizonte se registrara un enfrentamiento entre policías de Umopar con pobladores, con un saldo de un muerto y de tres heridos de bala.

Las operaciones, al mando del jefe nacional de Umopar, Edward Barrientos,  se desarrollaron de forma simultánea tanto en Nuevo Horizonte como en San Germán.

Hasta la tarde de ayer se descubrieron 112 fábricas que funcionaban camufladas como haciendas agrícolas y  otras en medio monte. Tras el hallazgo, los policías procedieron a su destrucción. 

Asimismo, los agentes intervinieron dos pistas clandestinas. Una estaba ubicada a unos 10 kilómetros de San Germán en plena etapa de construcción con tractores.  La otra pista operable fue ubicada a 20 kilómetros del mismo pueblo. Edward Barrientos informó de que tiene casi 800 metros de largo y 15 metros de ancho. En la mitad había una rejilla especial y Umopar cree que de aquí decolaban avionetas con droga e incluso los traficantes alquilaban la pista para operaciones de otros que no eran de su grupo.

También se detuvo a 10 personas y se incautó de $us 8.000, así como Bs 6.780, unos 60 taques de coca, dos motorizados y se halló un depósito clandestino de químicos en una vivienda en San Germán. Los operativos continuarán en la zona de Ichilo.

Matan a tiros a un brasileño frente al cuartel de San Matías

El Deber

La noche del lunes, en la localidad fronteriza de San Matías, un sicario acribilló a tiros al ciudadano brasileño Inaldo Becerra Lihnares, de 35 años. El crimen sucedió al lado del céntrico cuartel militar ubicado frente a la plaza principal, en la avenida Abaroa, según fuentes oficiales.

De acuerdo con la información del comandante de la Policía de Frontera, mayor Edwin Rojas, el hecho se produjo a las 20:40 en momentos en que la víctima circulaba en una camioneta Fiat. A decir de la autoridad policial, el ahora fallecido aparentemente conocía al esbirro, puesto que se detuvo a conversar, situación que el agresor aprovechó para herirlo de dos balazos en la región de la clavícula izquierda. Posteriormente le dio el tiro de gracia en la cabeza.

El sicario se dio a la fuga en un motorizado, mientras que el cuerpo inerte de Inaldo quedó desangrándose dentro del vehículo ante el estupor de los testigos.

El mayor Rojas manifestó que el asesinato tiene las características de una venganza, pero que se desconocen las causas.

El comandante informó de que Inaldo Becerra vivía desde hace varios años en San Matías, puesto que estaba casado con una ciudadana boliviana, con la que tenía una niña, de seis años, y un niño, de cuatro.

Este hecho de sangre se da a un mes y 12 días del linchamiento de los brasileños Rafael Max Diez (27) y Jefferson Castro Lima (22) por la muerte de los bolivianos Paulino Parabá Ramos (33), Vanderley Costas Parabá (27) y Édgar Rojas Suárez (26).