Son dos los “11 de septiembre” de Evo Morales. Dada la fecha, vale la pena comentar ambos. El primero es el sucedido en la población de Porvenir, departamento de Pando, hace cuatro años, que resultó en más de una decena de muertos; mientras que el segundo es su particular interpretación de lo acontecido en el atentado a las torres gemelas de Nueva York.En el caso nacional, los trágicos sucesos se produjeron en el marco de protestas contra el recorte del porcentaje del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) correspondiente a los departamentos, dispuesto por el gobierno evista, que derivaron en la toma de instituciones públicas en varias regiones.La respuesta gubernamental fue la movilización de grupos sindicales armados, precedidos por la amenaza del ministro Quintana de mandar “bajo tierra (…) a convivir con los gusanos” al prefecto de Pando, Leopoldo Fernández.Grupos que al tomar como rehenes a funcionarios de la Prefectura y asesinar a dos de ellos (Oshiro y Céspedes) desataron la respuesta violenta de los pobladores, que a su vez acabaron con la vida de varios partidarios del gobierno.El corolario fue el que tal vez se buscaba desde un inicio: la justificación para un Estado de Sitio y la militarización de Pando. Proceso en el que se produjeron dos muertes más: la del pastor Rivera, ametrallado por fuerzas militares en el aeropuerto de Cobija cuando pedía paz Biblia en mano, y la de un soldado horas después.Finalmente, vino el apresamiento de Leopoldo Fernández, a quien se mantiene encarcelado hasta hoy día, violando el límite legal de tres años para la detención preventiva, principio que le valió la libertad tiempo atrás al vicepresidente Álvaro García Linera, quien purgaba prisión por terrorismo.Además, la intervención militar ocasionó el exilio de unos 900 pandinos que buscaron refugio en territorio brasileño, de los cuales muchos aún permanecen asilados en el país vecino.Respecto al otro 11-S, recordaremos que Evo Morales lanzó dos años atrás la hipótesis de que el ataque criminal de Al Qaeda contra las torres gemelas fue en realidad “un autoatentado de Estados Unidos para acusar a algunas regiones y dominar so pretexto de terrorismo para acaparar sus recursos naturales”. Lamentables declaraciones que enriquecen el acervo de frases desafortunadas del gobernante cocalero…[email protected]