Gobierno de Bolivia gasta más de Bs 40 millones en difundir su política. La ministra de Comunicación en su informe reveló que hubo 482 transmisiones de los actos del mandatario Evo Morales en estos diez meses de 2012. El gasto de estas transmisiones a través de los medios estatales significaría Bs 23.4 millones, ya que se cobró una tarifa rebajada por hora y no por minuto, como se hace en las redes privadas.
Ministra de Comunicación rinde cuentas y revela que hubo 482 transmisiones de actos de Morales
Cartera de información y propaganda ejecutó Bs 79 millones del presupuesto
El despacho de propaganda de Dávila maneja Bs 108.4 millones para difundir la gestión del presidente Evo Morales.
En acto desarrollado en el auditorio de Entel, la ministra de Comunicación, Amanda Dávila, presentó su informe de gestión parcial, revelando que hubo 482 transmisiones de los actos en los que participó el mandatario Evo Morales en estos diez meses de 2012. El gasto de estas transmisiones a través de los medios estatales significaría Bs 23.4 millones
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“La política de transmisión de los actos de entrega de obras del presidente tiene que ver con la particularidad que desarrolla la gestión fuera del Palacio de Gobierno”, dijo Dávila.
La ministra destacó que su despacho superó el 73 por ciento del gasto presupuestado por el Tesoro General del Estado de Bs 108.4 millones para este año, no sólo en las transmisiones sino en la dotación de tecnología a los medios gubernamentales de comunicación Canal 7, radio Patria Nueva, periódico Cambio, Agencia Boliviana de Información (ABI) y la rede de emisoras comunitarias en todo el territorio nacional.
“El 73% de ejecución equivale a Bs 79 millones que se ha invertido en el tema de los activos, la compra de bienes inmuebles, vehículos, equipamiento y todo lo que es tecnología, además en recursos humanos y en tema de publicidad y campañas informativas”, precisó a ABI.
De acuerdo con los cálculos hechos por EL DIARIO, el presidente Morales, a nombre del Estado, habría gastado Bs 485.548 por cada transmisión.
Cabe anotar que muchas de las transmisiones superan ampliamente la media hora, pero si sólo se habría transmitido 30 minutos en cada una de las intervenciones del Mandatario, se pagó Bs 27, un equivalente a cuatro dólares por segundo, mientras en los otros medios se cobra un promedio de 12 dólares en horario normal y 17 dólares en horario estelar.
De esta manera se colige que la tarifa del canal estatal es apenas un tercio de lo que cobran el resto de las redes televisivas.
La autoridad aclaró que se cobró una tarifa por hora y no por minuto, menos por segundo, como se hace en las redes privadas.
Por otra parte, Dávila informó que el Ministerio de Comunicación realizó 140 campañas nacionales sobre la gestión gubernamental, que fueron difundidas en 80% de los canales de televisión y programas de radio de medios privados.
A su turno, la viceministra de Políticas Comunicacionales, Claudia Espinoza, informó que en las 140 campañas se invirtió Bs 18,2 millones para cumplir con la función de informar a la población sobre la gestión de Gobierno.
“Nosotros para difundir esas campañas aplicamos una política de democratización de la pauta publicitaria para dotar la publicidad del Estado a los medios”, explicó.
Finalmente, según ABI, el viceministro de Gestión Comunicacional, Sebastián Michel, anunció que el Ministerio de Comunicación implementará un proyecto de certificación de capacidades de los trabajadores de la prensa.
“La gestión en comunicación no sólo implica difundir los logros de la gestión sino también preocuparse del sector de la comunicación y los actores principales son los periodistas y trabajadores de la prensa, en ese sentido se está impulsando el reconocimiento o certificación de las capacidades de los periodistas que tienen conocimientos que no son reconocidos”, afirmó.
Gobierno gasta más de Bs 40 millones en difundir su política
Por transmisiones de eventos se erogó Bs 23,4 millones
Informe. La ministra de Comunicación dio ayer un informe parcial de los gastos de su cartera en la presente gestión
En lo que va del año, el Gobierno gastó Bs 41,6 millones en la difusión de campañas propagandísticas y en la transmisión en vivo de los eventos en los que participa el mandatario.
Durante el acto de rendición de cuentas a los movimientos sociales, la ministra de Comunicación, Amanda Dávila, reveló ayer en La Paz que las transmisiones en vivo de los diferentes eventos de los que participa el presidente han demandando Bs 23,4 millones, monto que hasta octubre ya supera el total invertido el año pasado, que fue de Bs 22 millones. La ministra dijo que este año se piensa cerrar el presupuesto de transmisiones en Bs 24 millones.
Es más, Dávila comentó que este monto “podría ser ampliado” el próximo año porque, según dijo, el presidente “es el principal comunicador del país”.
El monto pagado por este concepto va directamente al canal Bolivia TV, pues según la autoridad, ningún otro canal del país estaría en condiciones técnicas de hacer cuatro y hasta cinco transmisiones en vivo diariamente desde diferentes puntos del país.
Este año se realizaron 483 transmisiones en vivo, lo que en promedio significaría 1,6 emisiones por día.
Al monto de las transmisiones, hay que sumarle los Bs 18,2 millones que el Gobierno destinó a las campañas propagandísticas, que difunden las noticias desde su punto de vista o que buscan fijar un posicionamiento oficial respecto a algún conflicto, como fueron los casos de Colquiri y del motín policial.
Con ese monto se pagaron 140 campañas propagandísticas a lo largo y ancho del país. Según Dávila, el 80% del monto destinado a propaganda va a parar a los medios privados y solo el 20% a los medios estatales.
Este año, el Ministerio de Comunicación accedió a un presupuesto de Bs 108,4 millones, que representa el 0,86%. El 54% de ese monto, es decir Bs 58,5 millones, se destinó a servicios no personales, lo que incluye la propaganda y las transmisiones en vivo.
Una partida también importante es la de activos reales, en la que se cuenta la compra de un edificio para albergar al Ministerio de Comunicación y a los medios estatales, excepto Bolivia TV, además de siete vehículos.
Dávila no quiso revelar el monto que se pagará por el inmueble porque, según comentó, “todavía pensamos obtener una rebaja”.
La ministra anunció, además, que pedirá el incremento del presupuesto de su despacho del 0,8 al 1% del total del presupuesto del Estado.
Exministro dice que es exagerado
Para Hernán Terrazas Ergueta, exministro sin cartera responsable de la información gubernamental durante el Gobierno de Jorge Quiroga, los más de Bs 40 millones que ha utilizado el Ejecutivo en este año para promover la imagen presidencial le parece un gasto excesivo.
“Tengo la certeza de que un mayor gasto no es sinónimo de mayor popularidad”, sostuvo el exministro, para quien lo que vale es la gestión pública.
“Lo que la gente quiere son obras, ahí sí crece la imagen de un presidente, no por verlo más seguido en la televisión va a ser más querido por la gente”, señala el exministro.
Terrazas sostiene que con lo que se paga no se obtiene lo que se pretende porque al final resulta como un falso espejo donde se pretende ver como se quiere y no como es la realidad.
“Seguramente mientras más pase el tiempo, el Gobierno va a tener que gastar más debido al desgaste de la imagen del presidente, que ha ido cayendo, como una cuestión lógica del ejercicio gubernamental.
Para la exautoridad de Información en la gestión de ‘Tuto’ Quiroga, las cifras que se utilizan actualmente para dar a conocer los supuestos logros del Gobierno son tremendas y reflejan el abuso que se hacen con los bienes del Estado.
“Hasta ahora no aprendemos que el canal es estatal, no es de los gobiernos de turno, que lo utilizan sin ningún reparo, como un factor de propaganda, que, como lo dije anteriormente, no garantiza la popularidad de ninguna persona”, agregó.
Pagamos entre todos
Adrián Oliva | Diputado de UN
El presidente utiliza los medios estatales para hacer política, para promover las políticas de su Gobierno y para proyectarse políticamente para la siguiente elección.
Es lamentable que todos los bolivianos tengamos que pagar las acciones políticas que realiza el presidente, y tenga que utilizar recursos estatales, que no aportan a la democracia, al desarrollo del país, sino a su propia figura y a su objetivo de perpetuarse en el poder. Me parece una frivolidad que tengamos que disponer de esos recursos habiendo necesidades mucho más urgentes. Daría la impresión de que todo gira en torno a la imagen del presidente. Condenamos, rechazamos y lamentamos la visión patrimonial del manejo del Estado, que se ha vuelto más ‘prebendal’.