Una nueva generación de obispos asumió ayer la directiva de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB). La nueva directiva, integrada por obispos diocesanos, desempeñará sus funciones en el período 2012 y 2015.
Clero boliviano se renueva con obispos jóvenes
Monseñor Aparicio preside la CEB.
REUNIÓN ANUAL. La nueva directiva de los obispos fue electa para el período 2012-2015.
Página Siete / Cochabamba – 10/11/2012
Una nueva generación de obispos asumió ayer la directiva de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), que conmemora 50 años de servicio en el país. La nueva directiva, integrada por obispos diocesanos, desempeñará sus funciones en el período 2012 y 2015.
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Monseñor Óscar Aparicio fue electo como nuevo presidente de la CEB y reemplaza en esas funciones al cardenal Julio Terrazas; como vicepresidente asumió el obispo de Potosí, monseñor Ricardo Centellas; y como nuevo secretario general el obispo Auxiliar de El Alto, monseñor Eugenio Scarpellini.
“El primer reto que me viene a la cabeza es sustituir a monseñor Terrazas”, señaló Aparicio respecto del primado que estuvo al mando de la presidencia de la CEB durante 21 años, aunque en dos períodos diferentes, por lo que asumió esas funciones como “un gran, un gran desafío”.
En su mensaje al pueblo boliviano, monseñor Aparicio demandó que “acojamos a Cristo que nos trae la esperanza, el amor y la caridad”.
Uno de los primeros desafíos que debe emprender el nuevo líder de la máxima instancia episcopal es el Año de la Fe, que este domingo será lanzado oficialmente en el país con la concelebración de la Eucaristía en la Catedral de Cochabamba, ceremonia en la que participarán los obispos que asisten a la 94 Asamblea Ordinaria de la CEB.
Respecto de la misión permanente, Aparicio indicó que el reto es que “seamos hombres y mujeres de fe en Cristo Jesús, que es lo que nos da una identidad”.
En ese contexto, señaló que asumir la presidencia de la CEB es “gran desafío”, pues se trata de “sustituir a este gran hermano, este gran presidente de nuestra Conferencia Episcopal”, el presidente saliente, cardenal Julio Terrazas, el pastor que estuvo más tiempo al frente de la Conferencia Episcopal.
Terrazas, también arzobispo de Santa Cruz, fue elegido por primera vez como presidente de la CEB en 1985 y reelegido en 1988. El siguiente periodo, que fue el de mayor duración, comenzó en 1997 y en las siguientes votaciones volvieron a nombrarle hasta que este 9 de noviembre del 2012 fue reemplazado.
Entre las tareas inmediatas que debe realizar la nueva directiva de la CEB está continuar con la reestructuración de la CEB.
Aparicio ejerció por tres años como secretario general de la Conferencia Episcopal, función que le permitió conocer desde dentro la conferencia. Asumió ese cargo cuando era obispo auxiliar de La Paz. En junio de 2012 fue asignado obispo castrense.
La reunión episcopal se realiza en el marco de la conmemoración de acontecimientos importantes de la Iglesia boliviana, como los 50 años de apertura del Concilio Vaticano II, la inauguración del Año de la Fe, el inicio de la peregrinación de la cruz de la Jornada Mundial de la Juventud 2013 y los 50 años de la Conferencia Episcopal Boliviana.