El fin de semana, locales con rockolas, billares y karaokes fueron clausurados definitivamente por funcionarios de la Secretaría Municipal de Medio Ambiente dependiente de la Alcaldía, los operativos se realizaron en el Distrito Municipal N°7 a denuncia de vecinos cansados de soportar los estruendosos equipos de música, que abusivamente utilizan estos locales de expendio y consumo de bebidas alcohólicas en el principal paseo de la populosa zona.Ante el constante y ensordecedor ruido que hasta altas horas de la noche emitían estos locales, doña Rosario Pedraza una vecina de la Av. Cumavi nos decía, “Todos tenemos derecho a divertirnos, pero cuando esta diversión perjudica a los demás ya no está bien; tenemos derecho a descansar, además las leyes y ordenanzas municipales se hicieron para que se cumplan y nos faculta para denunciar este tipo de escándalos”, remarcó.El operativo de clausura tuvo lugar en las principales calles y avenidas de la ciudadela, donde funcionarios de la comuna procedieron a clausurar a más de ocho locales de diversión que alteraban la paz de los vecinos y contaminaban el medio ambiente a toda hora, acentuándose en horas de la noche y fines de semana.Al respecto Ivonne Satt titular de esta repartición municipal dijo, “Estas clausuras son el resultado de un seguimiento minucioso, coordinado, de verificación, medición de los decibeles elevados en cuanto a sonidos emitidos por estos equipos de música, y notificaciones a los propietarios; pero cuando se hace caso omiso a las normas las consecuencias legales son estas”, afirmó la autoridad haciendo referencia a que los dueños de estos “boliches” estaban advertidos.Para el control y fiscalización la normativa establece medidas preventivas, reguladoras y controladoras de emisión de ruidos en protección del derecho a la salud humana y el medio ambiente, a cargo de esta repartición municipal. El control se lo efectúa, bajo una clasificación de las fuentes generadoras del ruido mediante protocolos técnicos, mediciones de nivel elevado de los decibeles (dB) que en definitiva marca el grado de sanción y establece los procedimientos legales y administrativos a seguir ante una contravención de esta índole.Ivonne Satt también informó que las notificaciones, los operativos sorpresa y las clausuras se vienen con mayor frecuencia y severidad ya que en este mes de festividad por fin de año se incrementan estas actividades; “Tenemos mucho trabajo, pero debo decirle a la población que tenemos el 800-33-5000, Línea Verde para denunciar cualquier abuso o contaminación que sobrepase los niveles permisibles de emisión de sonidos y que obviamente afecta a la tranquilidad y la salud de nuestros vecinos y vecinas”, aclaró.