Escándalo por red crea tensión en el oficialismo; Senador del MAS pide salida de ministra Suxo

El escándalo de la red de extorsión formada por exfuncionarios del Gobierno de Evo Morales ha empezado a erosionar al oficialismo con discrepancias internas y contradicciones. El masista Félix Martínez exigió la renuncia de la ministra Nardy Suxo porque habría defendido a un exfiscal comprometido con la red mafiosa que operaba en Bolivia. Sectores sociales cuestionan la corrupción en el Gobierno.

Escándalo por red crea tensión en el oficialismo

SURGEN DISCREPANCIAS Y CONTRADICCIONES EN EL GOBIERNO Y EL MAS

image Los Tiempos – 15/12/2012



La exsocia de Jacob Ostreicher, la colombiana Liliana Rodríguez, a su llegada al aeropuerto de Santa Cruz, ayer. El De­ber

El escándalo de la red de extorsión formada por exfuncionarios del Gobierno ha empezado a erosionar al oficialismo con discrepancias internas y contradicciones.

El pedido de que las indagaciones de los vínculos de la red identifiquen a los “verdaderos responsables”, como planteó recientemente la presidenta de la Cámara de Diputados, Rebeca Delgado,  y que uno de los sospechosos del caso dijera que “viceministros y ministros” deben ser convocados a declarar, provocaron posiciones divergentes al interior del Movimiento Al Socialismo (MAS).

Los legisladores discrepan sobre si se debe o no investigar a otras altas autoridades, mientras continúan las críticas a Delgado por sus declaraciones.

Mientras crece la presión,  ayer la ministra de Transparencia y Lucha Contra la Corrupción, Nardi Suxo,  dijo que en octubre pasado recibió una denuncia contra los miembros de la red, incluido el exdirector de Régimen Interior Boris Villegas, un mes después de que éste había dejado de trabajar en esa dependencia.

Suxo, hace tres días, aseveró no saber nada sobre la red y que no conocía a sus integrantes.

Villegas, quien el miércoles fue enviado a la cárcel de Palmasola después de ser detenido en la ciudad de La Paz, indicó que él sólo cumplía órdenes que recibía de altos mandos del Gobierno.

“Nosotros tenemos una base de datos de las personas que han sido denunciadas por hechos de corrupción, el señor Villegas no tenía ninguna denuncia por un hecho de corrupción”, aseveró la ministra Suxo, ayer.

Pese a las explicaciones, suman las voces de que también los ministros de Gobierno, Transparencia y de la Presidencia, carteras en las que cumplían funciones los integrantes de la presunta red de extorsionadores, sean incluidos en las investigaciones, porque sí tendrían responsabilidad.

Mientras tanto, la comisión de fiscales a cargo de las pesquisas aún no tiene fecha para recepcionar las declaraciones de los ministros, pese a que el pasado miércoles se anticipó que serían convocados a declarar en calidad de testigos, al igual que el exfiscal General Mario Uribe.

Pese al escándolo que viene generando el caso, el presidente Evo Morales y el vicepresidente Álvaro García Linera han evadido referirse al tema. Por su parte, los ministros aludidos han salido a explicar su relación y responsabilidad con los ahora exfuncionarios implicados en la red.

García Linera evitó hablar ayer sobre las declaraciones del exdirector de Régimen Interior del Ministerio de Gobierno, que aseguró que él “hizo todo por órdenes superiores de ministros y viceministros”.

La autoridad, que participó en el lanzamiento de la campaña por los derechos del consumidor, abandonó rápidamente el salón principal de la Vicepresidencia. Pese a la insistencia de Erbol, sólo atinó a explicar sobre un libro  de la “Enciclopedia Jurídica”.

Divergencias

La ministra de Comunicación, Amanda Dávila, por su parte, minimizó las declaraciones de la presidenta de la Cámara de Diputados sobre la red de extorsión. Dijo que fueron a título personal y es considerada divergente, por lo cual no recibió el apoyo de los asambleístas del Movimiento Al Socialismo (MAS).

A decir de la autoridad, en este momento sería un error politizar el tema, motivo por el cual se aceptan las “opiniones diversas”, mismas que son consideradas internamente, siendo el respaldo mayoritario y unánime el que determina cuáles son las posturas que ganan.

De acuerdo a la autoridad, recurrir a los medios de prensa para ventilar estos problemas, es  propio de personas que no tienen los mecanismos adecuados para poder expresar sus ideas, hecho que quedaría evidenciado con la intervención de Delgado, quien afirmó que todavía no se dio con los “altos mandos” de la red de extorsión.

La aludida, Delgado, negó su alejamiento del MAS y afirmó que ella continuará denunciando todo hecho que afecte al “proceso de cambio”.

Advirtió que un “consorcio de abogados” estaría tratando de dañar al presidente Evo Morales.

“Siempre voy a denunciar todo hecho que considere que sí va a afectar el proceso de cambio, en este caso la corrupción y los hechos de corrupción podrían afectar la revolución democrática cultural a la cabeza del Presidente y del Vicepresidente (…). Aquí hay un consorcio de jueces, abogados y funcionarios públicos”, denunció la autoridad.

La Asamblea Legislativa, sin embargo, por mayoría tanto en Senado como Diputados, contrariamente a lo propuesto por Delgado, decidió no conformar ninguna comisión que investigue la red de extorsión que operaba al interior del Ministerio de Gobierno.

La presidenta de la Cámara de Senadores, Gabriela Montaño (MAS), dijo que una comisión legislativa podría “politizar” el tema.

Además, mencionó que la conformación de una comisión a estas alturas sería “extemporánea”, por lo que es pertinente que el Ministerio Público sea el que lleve adelante las investigaciones.

Avances 

Dentro de las investigaciones de la red de corrupción, ayer la exsocia de Jacob Ostreicher, la colombiana Claudia Liliana Rodríguez que guarda detención preventiva en la cárcel de Sucre, fue trasladada a la capital cruceña, para someterse a una revisión médica.

Interpelación a 3 ministros

La diputada del Movimiento Sin Miedo (MSM) Marcela Revollo informó que las respuestas que consigan de la interpelación que se realizará a la ministra de Transparencia, Nardi Suxo, y a los ministros de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, y de Gobierno, Carlos Romero, serán la base de la investigación paralela que están iniciando en torno al caso extorsión.

Las autoridades serán interpeladas por el pleno de la Asamblea Legislativa el próximo sábado 22 de enero a las 15:00.

Los tres ministros deberán responder un total de 126 preguntas referidas a las actividades que desarrollaba esta organización criminal y cómo se llegó a detectar esta red que llegó a extender sus tentáculos a varias estructuras del Gobierno.

Revollo dijo que esta será en verdad “la primera declaración de los ministros de cara al país” y que las respuestas serán tomadas en calidad de declaración.

La diputada aseguró que esta fue la única salida que le quedó al MSM tras la reiterada negativa de la bancada del MAS de investigar este caso.

Otros casos

Los funcionarios de la Dirección de Registro, Control y Administración de Bienes Incautados (Dircabi) y de la Agencia para el Desarrollo de las Macrorregiones y Zonas Fronterizas (Ademaf), detenidos en Beni, fueron enviados ayer a la cárcel, con detención preventiva, imputados por supuesta corrupción.

Fueron dos audiencias cautelares que presidió el juez Carlos Oliver.

En la primera comparecieron la exfuncionaria de Ademaf en Guayaramerín, Sonia Elvira Saucedo, y su familiar Hilda Mansilla, imputadas por uso indebido de influencias, beneficios en razón del cargo, legitimación de ganancias ilícitas, entre otros.

En la segunda, compareció  Hernán Tadeo Gallardo, exdirector departamental de Dircabi, quien fue aprehendido en La Paz, por el supuesto delito de uso indebido de influencias.

Senador del MAS pide la salida de Suxo por la red

El caso de las extorsiones causa fricciones en el  Gobierno. El masista Félix Martínez exigió la renuncia de la ministra Nardy Suxo porque, supuestamente, defendió a un exfiscal comprometido con la red.

Sectores sociales cuestionan la corrupción en el Gobierno

INFORME. El gabinete del presidente Evo Morales está en la mira de las organizaciones sociales. Los afines destacan avances en la economía, mientras que los opuestos aplazan la gestión gubernamental

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SURGEN LAS CRÍTICAS. SECTORES DEL MAS CUESTIONAN A MINISTRA

El Deber, La Paz

Al menos tres organizaciones sindicales a escala nacional aplazan la gestión de los ministros del presidente Evo Morales, a los que acusan de haber agudizado los conflictos sociales por su actitud soberbia. En la otra vereda, representantes de sectores sociales afines al Gobierno afirman que hubo avances importantes en la economía y en programas de ayuda para los campesinos.

No obstante, mostraron preocupación por la corrupción, incluso el senador Félix Martínez, del MAS, pidió la renuncia de la ministra de Transparencia, Nardi Suxo, por este tema.

Sectores

Entre los indígenas hay molestia. El líder del Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Q’ullasuyu (Conamaq), Félix Becerra, dijo: “Tenemos desconfianza de los ministros porque muchos no son del proceso y buscan dividir las organizaciones”.

“En algunos ministerios hemos visto actitudes que marcan soberbia y prepotencia. Muchos conflictos se han agudizado porque los ministros no los atienden oportunamente”, opinó José Luis Delgado, dirigente de la Central Obrera Boliviana. Mencionó como ejemplos la marcha de los originarios del Tipnis, el conflicto minero y el de salud.

El secretario de Conflictos de la Federación de Trabajadores Mineros de Bolivia, Édgar Mejía, indicó: “Para nosotros todos los ministros son incapaces” porque no atienden las demandas. Según Mejía, el Gobierno privilegia a algunos sectores, como a los cocaleros de Chapare, a pesar de que no tributan al Estado.

Por su lado, el líder del Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Q’ullasuyu, Félix Becerra, dijo: “Tenemos desconfianza de los ministros porque muchos no son del proceso y buscan dividir a las organizaciones sociales”.

Gobierno

El viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César Navarro, respondió que la presente gestión se caracterizó por “la consolidación tanto política como económica del Estado Plurinacional” y sobre los conflictos aseguró que “se están resolviendo de manera estructural”.

El dirigente Rodolfo Machaca, de la Confederación de Campesinos de Bolivia, defendió la gestión del gabinete e indicó: “Hasta el momento hemos visto que está despegando los programas, el tema de apoyo técnico, capacitaciones y orientación a las comunidades”.

La ejecutiva de las Bartolina Sisa, Juanita Ancieta, aseguró que “seguramente habrá algunas debilidades, pero eso se corrige, y resaltó la coordinación con los ministros

Sobre el tema 

El presidente de la Fejuve de El Alto, Javier Ajno, afirmó: “En general, en tres o cuatro meses que estamos hemos tenido una buena coordinación, incluso con el presidente Evo Morales, hubo una coordinación casi continua. La gestión ha sido de regular para arriba”.

Los ministros más observados por los sectores sociales cuestionadores fueron Juan Ramón Quintana, Carlos Romero, Mario Virreira, Juan Carlos Calvimontes y Nardi Suxo. Hay además varios viceministros en la lista.

El Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Q’ullasuyu (Conamaq) pidió al Gobierno del presidente Evo Morales no dividir la organización y decidió invitarlo a la ‘mara tantachawi’ (reunión anual) de 2013 para que exponga sus diferencias con el Consejo de Consejos de la organización.

La Confederación Sindical de Mujeres de Comunidades Interculturales de Bolivia (Csmcib) prometió fortalecer la unidad de ese sector y respaldar el proceso de cambio en el congreso ordinario que se realiza en La Paz.

ANÁLISIS 

Se advierten posibles cambios

Carlos Cordero | ANALISTA

Hasta hace poco tiempo el Gobierno tenía todo el apoyo de los movimientos sociales y esa era su fortaleza. Eso ha cambiado porque varios de esos sectores se han distanciado y han aparecido sectores críticos. Esto es consecuencia de acciones gubernamentales que han ido lastimando a sectores de clase media, asalariados. Pero por supuesto que todavía hay grandes sectores que están con el Gobierno, principalmente están en las zonas rurales.

Este hecho de tener un apoyo fragmentado, primero debilita su gobernabilidad, por lo que los conflictos el próximo año van a ser más fuertes y van a obligar a renovar parte del gabinete. Más allá de un gabinete técnico, se va a necesitar un gabinete con más habilidades políticas, porque la conflictividad va a subir, pues se han fortalecido estos grupos opositores principalmente por los hechos de corrupción denunciados, porque no hay respuestas prontas y porque toda esta red de corrupción es algo que ha nacido en el Gobierno de Evo Morales. El otro gran problema es que se ha evidenciado ineficiencia en distintas reparticiones. El propio presidente se ha quejado por eso. Todo ello va a pesar en la decisión del Gobierno de renovar algunos ministerios