“Si la justicia no es neutral y no hace justicia, el país se va a pique”. El creador de la Fundación Hombres Nuevos aseguró que a pesar de que la macroeconomía está bien, Bolivia marcha mal.
Nicolás Castellanos ve al país en decadencia
“Si no se hace justicia, el país se va a pique”
Una sencilla casa en una esquina del populoso Plan Tres Mil
El Deber, Santa Cruz
Desde su sencillo patio, por donde camina con soltura un gallo colorido, monseñor Nicolás Castellanos expresa sus preocupaciones sobre la realidad nacional.
¿Cómo ve Bolivia en 2012?
En el país hay cosas positivas, como que le está yendo bien a la macroeconomía, pero desde mi punto de vista yo llevo 21 años en Bolivia y nunca había visto la situación tan deteriorada como ahora, nunca había visto esta corrupción, estos problemas de extorsión. Para mí es un signo de que esto está muy decadente. Si la justicia no es neutral y no hace justicia, el país se va a pique.
En una encuesta que hablaba de la aceptación o rechazo de las instituciones en el país, las dos únicas que quedan bien paradas son los medios de comunicación y la Iglesia. La justicia queda en el último lugar, un 70% de los bolivianos la rechaza. Esto para mí es la víspera de un cataclismo.
¿Cuáles cree que son las causas para todo esto?
Tienen que haber muchas razones. Siempre hemos tenido fama de ser un país corrupto, pero a mí me parece que estamos en la cúspide de la corrupción. Una causa, por ejemplo, es que los políticos no tienen voluntad de servir al pueblo. Lo dijo la ONU en el mes de mayo, tenemos cinco millones de pobres, dos millones de niños pobres, tenemos 14.000 niños que fallecen todos los años por muertes evitables, un 27% de los bolivianos pasa hambre severa, entonces este es el problema, para mí todo lo demás son monsergas; es salir por la tangente, y el único camino que tenemos es resolver la pobreza, es la educación que, francamente, ayer y hoy, está muy desatendida, no tiene calidad, en este país no tenemos escuelas para todos.
Usted visitó Palmasola recientemente. ¿Para qué?
Sí, el pabellón de tuberculosos, de enfermos de sida y con algún trastorno mental, y es deprimente. Allí no hay dignidad, es lamentable que por Bs 100 un joven de 20 años, del Plan Tres Mil con tuberculosis, se haya muerto.
Por otro lado, este asunto de extorsión que se ha destapado muestra que hay otros ciudadanos anónimos que igual sufren. Creo que el caso Ostreicher es solo la punta del iceberg, porque hay numerosas personas que son extorsionadas, pero no pueden denunciar.
¿Qué opina sobre el narcotráfico y la inseguridad?
Todo eso va unido, nos estamos dando cuenta de que el entorno en que vivimos es injusto, va contra las personas. No se está combatiendo el narcotráfico, no hay voluntad política para combatirlo, es lamentable que vayamos en camino de convertirnos en un país como México.
En lo local, ¿qué opinión tiene sobre la crisis del Concejo Municipal?
Eso es impresentable, eso es decir que se están riendo de nosotros, nos están tomando el pelo, y así está la ciudad, porque aquí vienen muchos extranjeros y se marchan extrañados de cómo Santa Cruz es la ciudad más sucia y desordenada de Bolivia. Santa Cruz es un verdadero desastre porque no tenemos gobierno, y si nos dedicamos a la pelea política abandonamos el trabajo social, comunitario, cultural.
También me parecen incomprensibles las inversiones millonarias mientras hay tantas necesidades básicas. ¿Por qué estos días se ha gastado un millón de dólares en una fiesta del solsticio? Ese dinero tendría que ir, por ejemplo, a los hospitales.
¿Habrá una salida?
Jesús nace en Belén para traer la esperanza y qué duda cabe que la única salida es la lucha, es el no conformismo. Estoy leyendo a Filemón Escobar cuando habla de las dictaduras y cómo cuatro mujeres y el padre Gregorio Iriarte tumbaron la dictadura de Banzer. Hay que reclamar por medios pacíficos, dialogando, buscando soluciones. Es necesario que la sociedad civil reaccione y exija lo que le pertenece al pueblo.
Nicolás Castellanos F.
FUNDADOR DE HOMBRES NUEVOS
77 AÑOS
VIVE EN SANTA CRUZ
SE ORDENÓ EN 1959
Nació en Mansilla del Páramo (León, España) en 1935. Siendo adolescente, ingresó a la Orden de San Agustín, donde realizó sus primeros votos en Palencia el 10 de septiembre de 1953; tras realizar sus estudios eclesiásticos en el monasterio burgalés de Santa María de la Vid, se licenció en Filosofía y Ciencias de la Educación en la Universidad Pontificia Salesiana de Roma y se diplomó en el Pontificio Instituto Teresianum de Espiritualidad, también en la capital italiana. Fue ordenado sacerdote el 12 de julio de 1959.
IMPULSA LA EDUCACIÓN EN BOLIVIA
En 1992 llegó a Santa Cruz e inició una importante labor social con el proyecto Hombres Nuevos; hasta la fecha ha fundado más de 100 escuelas en Bolivia.