Investigación. Autos tributaron como si fueran a gas. La Aduana Nacional de Bolivia espera que un peritaje determine el daño económico contra el fisco.
Página Siete / La Paz
Un motorizado internado legalmente al país.
La Aduana Nacional de Bolivia (ANB) confirmó que seis autoventas de Santa Cruz incurrieron en el presunto delito de defraudación fiscal, aunque todavía se desconoce el monto al que asciende el daño económico, que será establecido mediante un peritaje.
“Sería el primer caso de defraudación fiscal que estamos peleando, porque sí está el elemento fundamental, que son las declaraciones únicas de importación (DUI), en las que dice que el momento en que se nacionaliza (un vehículo) se lo hace a gas; ésa es la prueba documental fehaciente”, aseguró la presidenta de la entidad recaudadora, Marlene Ardaya.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
Sin embargo, el proceso de investigación contra seis autoventas, que radica en Santa Cruz, está paralizado debido a que el fiscal general aún no designó al representante del Ministerio Público adscrito a la Aduana.
La fiscal que anteriormente estaba encargada del proceso fue suspendida de sus funciones.
Ardaya explicó también que está pendiente un peritaje de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, que permitirá establecer cómo los autos fueron transformados a gas natural vehicular (GNV). Con ese estudio, también se espera obtener información sobre la cantidad de vehículos a GNV que fueron internados por las autoventas y el daño económico ocasionado al Estado.
“Se habla de 200 millones de bolivianos, pero es difícil de calcular, puede que sea más, puede que sea menos, por el tipo de vehículo, el año y las características, toda vez que se vaya adelante con este proceso vamos a definir los daños”, manifestó.
Según la denuncia, esos negocios que importan motorizados dejaron de pagar el Impuesto al Consumo Específico (ICE) porque se ampararon en el reglamento de la Ley 3467, que exime del pago de ese tributo a coches que sean convertidos a GNV. Las autoventas instalaron kits o equipos de GNV a vehículos nuevos, pero luego los sacaron y vendieron los motorizados para uso de gasolina.
En Santa Cruz también cursa un proceso iniciado por Toyosa contra una autoventa. En este caso se indaga la importación de 2.000 motorizados/año por un valor de 20 millones de dólares.
La conversión a GNV era temporal
Pago. La Ley 3467, que modificó el Código Tributario, eximió del pago del Impuesto al Consumo Específico (ICE) a la importación de vehículos nuevos que cambiaran de gasolina a GNV.
Proceso. Ese beneficio, según las investigaciones, fue mal utilizado por al menos seis autoventas de la capital oriental, que, con la finalidad de favorecerse con la exención, adaptaron temporalmente kits o equipos de GNV a vehículos nuevos, aunque luego de ser internados les quitaron los equipos para venderlos como motorizados a gasolina.
Demanda. La empresa Toyosa interpuso una demanda contra el propietario de una de esas autoventas, Jaime Luis Parada Méndez. La Aduana inició otro proceso contra esa autoventa y otras cinco.