Un médico boliviano, que asegura curar el chagas, quiere crear vacuna


Enfermedad tropical. Hace más de 10 años Jesús Franco realiza tratamientos a personas afectadas por la enfermedad que es transmitida por la vinchuca. Ahora quiere que instituciones o laboratorios lo colaboren.

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Más de 10 años de investigación dieron por resultado el medicamento que utiliza Franco



El Deber, Santa Cruz

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Jesús Luis Franco Pedraza es un médico que lleva más de 10 años haciendo tratamientos a enfermos de chagas; según sus cuentas, sus pacientes suman más de 100 con resultados altamente positivos, pero necesita recursos para poder elaborar una vacuna que serviría para evitar también la leishmaniasis, la toxoplasmosis y la enfermedad del sueño.

Franco señala que, trabajando en el Centro Nacional de Enfermedades Tropicales de Santa Cruz, donde hizo un estudio sobre el chagas, encontró, después de realizar una amplia investigación, dos sustancias con poder tripanocida, autorizadas por los organismos de salud.

Una vez lograda la autorización del Cenetrop, prosiguió sus investigaciones, esta vez laboratorialmente, en ratones y conejos, logrando erradicar totalmente el Tripanosoma cruzi, que origina la enfermedad.

Tras esa experiencia ahora ha elaborado un producto que utiliza desde hace más de 10 años para curar a pacientes de todas las edades.

Resultados   

“He tratado a más de 100 pacientes con resultados altamente positivos. Hasta tuve uno de 93 años, al que a pesar de su edad le pudimos dar una mejor calidad de vida”, sostuvo Franco. Con varios resultados, de reconocidos laboratorios, el médico muestra la efectividad de su tratamiento.

Durante el proceso de investigación también se logró la sanitización de la sangre, la erradicación de los parásitos en los animales y luego la vacuna contra el chagas. 

Luego se pasó a la segunda etapa, que era el tratamiento en los humanos, para lo cual hubo voluntarios -familiares de trabajadores del centro-, preparamos un jarabe de medio litro y se logró negativizar el serodiagnóstico, aseguró.

“Necesitamos pasar a la fase ampliatoria de más pacientes, haciendo seguimiento de las personas tratadas y la producción en serie del medicamento, para lo que se necesitan recursos”, asegura Franco

CIFRAS    

18 Millones de personas

Son infectadas cada año por el mal de Chagas en todo el mundo, de las cuales mueren unas 50.000. Es endémica en la región americana, y se extiende entre México y Argentina.

35%. De los pacientes chagásicos

En la etapa crónica suelen padecer cardiopatía difusa grave o dilatación patológica del esófago y del colon y también la muerte repentina.

PARA SABER   

ENFERMEDAD PARASITARIA

1  El chagas, también conocida como tripanosiomasis americana, es una enfermedad parasitaria tropical, generalmente crónica.

2   La importancia de la parisiosis radica en su elevada prevalencia con grandes pérdidas económicas por incapacidad laboral o muerte.

3  Ha sido un azote para la humanidad desde la antigüedad y es conocida como la enfermedad de la pobreza.

Protagonista   

Jesús Luis Franco Pedraza / Médico

Médico internista

60 años

Santa Cruz de la Sierra

Una vida investigando

Jesús Franco nació en Santa Cruz de la Sierra el 1 de agosto de 1952. Hizo sus estudios secundarios en el Colegio Nacional Florida para después cursar estudios superiores en la Universidad Real Mayor y Pontificia de San Francisco Xavier de Sucre. Hizo su internado en la capital cruceña, para luego, haciendo uso de una beca otorgada por la Organización Mundial de la Salud (OMS)  irse en 1980 a la Escuela de Malariología y Saneamiento Ambiental en Venezuela. Una vez concluido su curso y cumpliendo con la OMS se fue a Cobija como director de malaria en Pando y Beni.  Cumplida su misión trabajó en el Centro Nacional de Enfermedades Tropicales (Cenetrop) de Santa Cruz donde revisando archivos y bibliografía descubrió nuevas formas para tratar el mal de Chagas. Dice que ha enviado sus estudios, a través de un colega, a la sede de la OMS en Ginebra (Suiza), pero que no los han recibido porque ellos trabajan con instituciones estatales.

Ahora espera que el Gobierno, a través del Ministerio de Salud o un laboratorio, lo auspicie para lograr su objetivo.