Gobierno califica como “falsa y nada confiable”, que expresa sus “intereses políticos”. Instituciones representativas de la prensa sostiene que el informe revela la “realidad nacional”. La prensa en Bolivia “sufre una constante y sistemática acción de amedrentamiento”.
La clasificación sobre el comportamiento de la libertad de prensa en 179 países del mundo, calificada por la organización internacional “Reporteros sin Fronteras”, ha colocado a Bolivia en el puesto 109, de acuerdo con un nuevo indicador que posibilita contar con una herramienta analítica para el desempeño global y que le permite evaluar el estado general de lo que significa la libertad de informar. Significa que en el país, este atributo de la democracia, no rige o tiene una muy limitada vigencia, impuestas por el poder político.
Una reacción gubernamental fue transmitida por el diputado Marcelo Elías, quien dijo que “el Gobierno garantiza la libertad de expresión, plenamente, de acuerdo con la Constitución Política del Estado. Calificó, de esta manera, como “falsa y nada confiable” dicha evaluación y, a su juicio, esa entidad internacional, “expresa sus intereses políticos”.
Las representaciones de la prensa boliviana, a su vez, consideraron que la calificación tiene relación con la realidad nacional que, durante el 2012, experimentó el país. Según Juan León y Antonio Vargas, ejecutivo de la Asociación Nacional de la Prensa y la Asociación de Periodistas de La Paz, respectivamente, la prensa en Bolivia “sufre una constante y sistemática acción de amedrentamiento”, tanto desde los niveles de gobierno, como de las organizaciones sociales vinculadas con el poder político.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
Un ejemplo de esa acción, protagonizó ayer la Federación de Choferes de La Paz, cuyo secretario ejecutivo, René Vargas, declaró a los periodistas que “cubrían” la información relacionada con un ampliado del sector, como “enemigos de los conductores de La Paz” y “amigos” del opositor alcalde de la ciudad, Luis Revilla. Inmediatamente después, ordenó que todos los periodistas sean “desalojados” de las instalaciones de esa organización social.
Con la aplicación de una serie de disposiciones legales aprobadas durante el presente período gubernamental, los periodistas viven bajo un tenso clima de presiones en el desarrollo de su trabajo y, cuando se producen hechos contrarios al Gobierno, los actores de la política gubernamental, echan la culpa a los periodistas. Esta actitud no sólo es característica del presente, sino también se ha registrado en el pasado, dijo León a EL DIARIO.
“Debido al desarrollo de nuevas tecnologías y a la interdependencia de los Estados y las poblaciones considera que no es posible apreciar la libertad de producción y circulación de información, si no se cuenta con una medida a escala mundial. En 2013 el índice asciende a 3.395 puntos, una cifra de referencia para los próximos años”, dice la organización y que fue difundida por ANF. En esta categorización, ocupa el primer puesto Finlandia que se distingue como el país más respetuoso de la libertad de prensa. El Diario.
Bolivia ocupa el puesto 109 en la clasificación de Libertad de Prensa
Evaluación de Reporteros Sin Fronteras en el mundo.
El Diario, La Paz
La labor de la prensa es ejercida con recelo por los reclamos y amedrentamientos del poder. León Cornejo afirma que incluso existen casos de violencia que no han sido resueltos.
El reciente informe de clasificación de la Libertad de Prensa en el mundo realizada por Reporteros Sin Fronteras ha dejado a Bolivia en el puesto 109 de 179 países, situación que hace evidente las restricciones que tiene el ejercicio informativo en el actual contexto político y social. El dato es revelado luego que autoridades de Gobierno salieran a criticar y hacer sindicaciones sobre la labor de algunos medios que abordaron la controversia en la cumbre de la Celac entre los presidentes de Bolivia y Chile desde una perspectiva que no le gustó al Gobierno.
Los datos son importantes pues marcan la pauta de la labor informativa en el ejercicio de la libertad de expresión, elemento consagrado en tratados internacionales y las mismas constituciones de países como Bolivia, donde sin embargo este derecho es “aprisionado y condicionado”, como dijo el presidente de la Asociación de Periodistas de La Paz (APLP), Antonio Vargas.
El América Latina, los países del bloque de la Alternativa Bolivariana para Nuestros Pueblos (ALBA) mantienen un perfil “totalitario” con Cuba, Ecuador, Venezuela y Bolivia, en ese orden, con puestos por debajo del 100.
Llama la atención el caso de Brasil que se encuentra a un punto de Bolivia con el puesto 108 de los 179 países, pues anteriormente se consideraba a esta nación como un ejemplo del respeto a la libre información. Incluso el expresidente Luiz Inacio Lula da Silva dijo que era mejor que la prensa “hable a que calle”, siendo hoy una preocupación para la administración de la mandataria Dilma Roussef.
Con ocasión de la publicación de la Clasificación Mundial 2013, Reporteros sin Fronteras publica por primera vez un índice anual de la libertad de prensa. Gracias a la creación de este nuevo indicador, esta organización de periodistas contará con una herramienta analítica del desempeño global de los países, que le permitirá evaluar el estado general de la libertad de informar. Debido al desarrollo de las nuevas tecnologías y a la interdependencia de los Estados y las poblaciones, pues, considera que no es posible apreciar la libertad de producción y circulación de información si no se cuenta con una medida a escala mundial. En 2013 el índice asciende a 3.395 puntos, una cifra de referencia para los próximos años, cita RSF.
En Bolivia, el último reclamo airado de las autoridades del Gobierno central contra la labor informativa fue hecho el martes tras la publicación de algunos diarios que titularon sus noticias dando mayor énfasis a la respuesta del presidente chileno Sebastián Piñera que a la intervención del mandatario boliviano Evo Morales en la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños del lunes, donde hubo un intercambio de criterios sobre la demanda marítima.
Por más de media hora, la presidenta de la Cámara de Senadores, Gabriela Montaño, en PAT descargó todas sus críticas a los citados medios, uno de Santa Cruz, argumentando que “no era posible que exista cobertura a favor de Chile” y que “no les pedía ser militantes del histórico proceso” de la demanda marítima, pero que les pedía “no mentir al pueblo boliviano”.
Similar situación sucedió con la ministra de Comunicación, Amanda Dávila, quien estuvo en Red Uno con el mismo discurso y reproche a los medios que informaron a su modo sobre la cumbre internacional y las repercusiones generadas.
“Me llama la atención, me duele, me indigna, que se adopte el discurso chileno, con una visión antinacional, y que no actuemos como bolivianos, preservando temas que son delicados y defendiendo nuestro derecho soberano, nuestra posición, cuidando que esa posición no sea debilitada por intereses’”, manifestó la autoridad, experiodista en ejercicio, quien preguntó: “¿por qué no se remiten a lo que dice el presiente (Morales)?”.
DATOS
El ranking latinoamericano es encabezado por Perú (105), Bolivia (109), Ecuador (119), Venezuela (117) y Cuba (171). Mientras las naciones más respetuosas de este derecho humano son Costa Rica (18) y Uruguay (27).