El director de Digcoin-Bolivia, Luis Cutipa, habría enviado al menos 45.000 toneladas de coca incautada hacia el narcotráfico. Sus hermanas están implicadas.
Denuncian que coca incautada se desvía hacia el narcotráfico
El director de Digcoin fue acusado de enriquecimiento ilícito.
Documentos. Personas ligadas a la dirección general de la hoja hicieron llegar un memorial a tres ministerios con detalles de las presuntas irregularidades.
Página Siete / La Paz
El depósito de coca de la Digcoin. Derecha, una de las declaraciones juradas. Archivo Página Siete
La Dirección General de la Hoja de Coca e Industrialización (Digcoin) desvió al menos 45.000 toneladas de coca incautada desde 2006 hacia fines ilícitos, denunciaron -mediante un memorial dirigido a tres ministerios- personas ligadas a esta instancia de Gobierno.
El director de Digcoin, Luis Cutipa, negó cualquier tipo de desvío y aseveró que desde 2010 la coca incautada va a universidades y empresas para ser industrializada. Más detalles, en la nota de apoyo de esta página.
El memorial fue remitido a los ministerios de Desarrollo Rural y Tierras, de Gobierno y de Transparencia. Según los denunciantes, quienes pidieron mantener su identidad en el anonimato, las 45.000 toneladas de coca que presuntamente fueron desviadas tienen un valor aproximado de 18 millones de bolivianos.
Página Siete tuvo acceso al documento en el que se denuncia que Cutipa envía la coca secuestrada “a sus hermanas, Severina y Sara Cutipa, quienes se dedican a la acumulación de coca en las localidades de San Germán, Kilómetro 27 y Yapacaní (Santa Cruz) para desviarla al narcotráfico”.
Estas regiones fueron declaradas por el Ejecutivo zonas rojas del narcotráfico.
El memorial agrega que un informe del entonces jefe de Verificaciones de Digcoin en Santa Cruz, Juan Carlos Robles, emitido en julio de 2011, indica que cuando realizaba un control por el lugar recibió una llamada de Cutipa, quien le ordenó suspender su labor en esas tres regiones.
“Otra autoridad regional ordena seguir con el trabajo cuando recibí el reporte de que cuatro camiones iban con coca desde La Paz con destino a Yapacaní”.
Robles informa que ambas hermanas de Cutipa acumulan la hoja. Además señala, en el documento, que un sobrino suyo, Richard Pozo, trabaja en Digcoin Santa Cruz y “protege el acopio de las hermanas”. El director negó que Pozo sea su familiar.
Más documentos
Además, este medio recibió tres declaraciones juradas en las que los declarantes confirman que trasladaron o compraron coca de parte de Cutipa.
“Recibí una oferta económica por parte de Óscar Calla por órdenes de Luis Cutipa con el fin de que haga el traslado de 80 taques (cada uno equivale a 50 libras) a la ciudad de Santa Cruz supuestamente para un ampliado de emergencia de la Confederación Única de Trabajadores Campesinos. El monto al recibir por el traslado era de 400 dólares”, se lee en una de las declaraciones hecha en julio de 2012 por una persona con iniciales P.A.Q.D.
Esta persona además cuenta que el 18 de abril de 2012 “procedí a hacer el traslado de los taques a las 2:00, en inmediaciones de Digcoin; me dieron una hoja de ruta que me autorizaba a trasladar la coca a Santa Cruz”.
En otra declaración, otra persona relata que compró 70 taques de coca, cada uno a 950 bolivianos. “La coca salió con hoja de ruta de Cutipa y me entregaron a la 1:30 del 19 de mayo del 2012”, indica la nota.
Las personas que denunciaron al director de Digcoin anunciaron que presentarán una denuncia ante el Ministerio Público por el delito de enriquecimiento ilícito en contra de Cutipa.
Luis Cutipa niega las acusaciones y afirma que lo quieren dañar
El responsable de la Dirección General de la Hoja de Coca e Industrialización (Digcoin), Luis Cutipa, negó que la coca incautada sea desviada al narcotráfico y aseguró que hay personas que le quieren hacer daño para que deje su cargo.
“No tengo ninguna denuncia en mi contra. Cada año hago mi declaración de la coca incautada, incluso el año pasado me pidieron un certificado de antecedentes”, afirmó.
Dijo que quienes desvían la hoja de consumo tradicional son los comerciantes ilegales que existen tanto en La Paz como en Cochabamba. “Eso estamos controlando, nos falta personal pero igual trabajamos”, sostuvo.
La autoridad de industrialización de la coca aseveró que hasta 2010 toda la coca secuestrada fue incinerada.
“A partir de 2011 fue entregada a algunas instituciones. Aquí, por ejemplo, hemos enviado casi 300 mil libras a la Universidad Pública de El Alto (UPEA) para que los estudiantes hagan pruebas. Hicieron abonos. Este año entregaremos otra cantidad”.
Aseguró a este medio que la intención de las personas que lo denuncian es que deje la dirección de Digcoin.
“Esta gente quiere que yo me salga de aquí, quieren hacerme quedar mal con comentarios y la justicia está ciega”, afirmó.
Agregó que presume que la denuncia en su contra surgió como una venganza de una acción que hizo la Dirección General de la Hoja de Coca e Industrialización contra funcionarios en Santa Cruz que presuntamente desviaron 1.000 taques de coca al narcotráfico el año 2009.
“Sigo con trámites judiciales por esto, pero ellos no rindieron cuentas a la justicia. A mí me atacan, pero la justicia no colabora con lo que yo denuncié”, manifestó el director de Digcoin.