Desembolsos durante la gestión 2012. Financiamiento. Prevén entregar cantidad similar para proyectos públicos.
Ingenio. La planta de San Buenaventura, uno de los que se construye con financiamiento de las reservas del BCB.
El Banco Central de Bolivia (BCB) informó ayer que en la gestión 2012 desembolsó para los proyectos de las empresas estatales 1.149 millones de dólares (mdd).
El presidente del BCB, Marcelo Zabalaga, informó que para este año se prevé entregar un monto similar. Precisó que los desembolsos se hacen en moneda nacional, lo que no afecta a las Reservas Internacionales Netas (RIN), que superan los 14.100 millones de dólares.
Zabalaga explicó, además, que en caso de que las empresas requieran dólares para importar maquinarias, la conversión la realizan en cualquier entidad del sistema financiero.
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Con aval legal. Desde 2009, las leyes financiales autorizaron al BCB a otorgar créditos en favor de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Corporación Minera de Bolivia (Comibol), Empresa Nacional de Electricidad (Ende), Empresa Azucarera San Buenaventura (Easba) y para la construcción del tramo férreo Montero-Bulo Bulo, que está bajo tuición del Ministerio de Obras Públicas y Vivienda.
En total el BCB aprobó créditos por 19.348 millones de bolivianos (unos 2.779 millones de dólares).
En lo que va del año, el BCB autorizó recursos para Ende, que servirán para financiar la construcción de una tercera fase de la represa San José, además del préstamo para el tramo férreo Montero-Bulo Bulo, que fue incluido en la Ley Financial 2013. Ambos créditos ascienden a 400 millones de dólares (2.874 millones de bolivianos).
Abonan intereses. Zabalaga también informó que las empresas estatales, entre ellas YPFB, Comibol y Ende, comenzaron a pagar los intereses de esos préstamos, pero no así el capital, pues tienen entre dos y seis años de gracia, en los que no reembolsan el capital de los créditos contratados.
Que el BCB sea utilizado como "caja" del Poder Ejecutivo ha sido cuestionado por sectores opositores, que temen que las inversiones se destinen a proyectos riesgosos y ocasionen mora.
Agencias y El Día