Bolivia. Hace cinco días que salió libre de Palmasola (Santa Cruz) y viajó a San Matías donde fue acribillado.
Pertenecía a una red vinculada al Comando Vermelho de Brasil. Desconocidos en motocicleta le dispararon cuando, junto a dos de sus amigos, pescaba en el Curichón. Hay dos hombres presos.
Están siendo procesados por narcotráfico por la Fiscalía antinarcóticos de Santa Cruz.
El brasileño Jhonny Vas de Almeida, que figuraba como integrante de una red de sicarios a sueldo y traficantes de cocaína vinculada al Comando M-16 de Vermelho Brasil, fue asesinado a balazos cuando, junto a dos amigos, pescaba en el Curichón de San Matías.
Según la Policía, el suceso violento que causó conmoción nuevamente en San Matías se registró alrededor de las 21:00 del sábado en la zona denominada el Curichón a 5 kilómetros del pueblo.
La información fue confirmada por el fiscal Marcelo Delgadillo, que según los primeros informes, Jhonny Vas de Almeida fue sorprendido por sujetos en una motocicleta que llegaron y abrieron fuego para después escapar con rumbo desconocido.
Efectivos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de esa localidad levantaron el cadáver y verificaron que recibió varios disparos de arma de fuego en la cabeza. Los restos del hombre fueron depositados en la sala del hospital central para la autopsia de ley, y luego entregados a su esposa, una boliviana.
Recién salió de Palmasola
Los informes policiales dan cuenta de que el miércoles pasado el hombre salió con libertad de la cárcel de Palmasola bajo medida sustitutivas, otorgada por un juez. Había viajado por tierra a San Matías junto a dos de sus amigos con los que decidió ir a pescar al Curichón.
Jhonny Vas de Almeida fue detenido a principios de enero de 2012 junto a 12 sujetos, en San Matías, cuando compartían un churrasco. La captura se realizó en un megaoperativo a cargo de efectivos de Umopar con la cooperación de policías federales de Brasil. Los detenidos fueron trasladados a Santa Cruz por motivos de seguridad. Todos fueron enviados a la cárcel de Palmasola por la jueza Dalia Pedraza, acusados por la Fiscalía de Sustancias Controladas por tráfico de cocaína y asesinatos en ajustes de cuentas por la mafia del narcotráfico.
En esa oportunidad, Jhonny Vas de Almeida fue enviado a Palmasola junto a los brasileños Alonso Ribeiro da Silva, Álex de Oliveira, Lenois de Moraes Silva, ‘Gugu’, Adailton Costa Lobo ‘Bilu’, Pablo da Silva Magallanes, Álex Santo Nascimento, ‘Tutra’ y los bolivianos Luis Carlos Durex, Édgar Núñez Salvatierra, Daniel Ortiz Hurtado, Ricardo Hurtado Araúz, Jhonny Sánchez Salvatierra y Gerardo Burgos Salvatierra ‘Paico’.
Hay dos detenidos
La Fiscalía confirmó que, tras el asesinato del brasileño, fueron detenidos sus dos amigos con los que disfrutaba de un día de campo pescando en el Curichón.
El fiscal Marcelo Delgadillo aseguró que se procedió a la realización de la prueba del guantelete de lunge sobre los amigos. Policías viajaron desde San Matías a Santa Cruz para sacar los resultados del guantelete.
Sin embargo, el fiscal expresó que la detención de los amigos es por fines investigativos, pues no se tiene la certeza de la complicidad de ellos en el crimen. La Policía de San Matías y agentes antidrogas realizan las pesquisas, pero no hay rastros de los sicarios que eliminaron al exrecluso.
Incautaciones a la red
Armas y cocaína
En enero de 2012, la Felcn, al detener a Jhonny Vas de Almeida, junto a 12 sujetos, incautó cocaína enterrada y armas de fuego de grueso calibre.
Asesinatos en San Matías
La Felcn cree que las armas que en enero de 2012 se incautó a la red de sicarios fueron utilizadas para eliminar al boliviano Luis Antonio Bazán Parabá y a otros.
La fiscalía ignora la liberación
El fiscal Marcelo Delgadillo dijo desconocer de la libertad otorgada por un juez a Jhonny Vas de Almeida, pero que pedirá informes.
Otros pidieron libertad
Hay solicitudes de libertad presentadas por los detenidos del M-16 que están en Palmasola.
Hay miedo de la gente por presencia de prófugos
La población de San Matías vive con permanente temor. Según testimonios de habitantes y de propios policías, esa localidad desde hace tiempo se ha convertido en refugio, especialmente de prófugos de Brasil.
Un policía que se desempeñó en la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de esa localidad dijo: “Yo tuve que pedir mi cambio y venirme escapando porque estaba amenazado de muerte. Allá no hay condiciones para trabajar, ningún camarada quiere arriesgarse. Hay solo dos cuartitos y los dormitorios quedan al lado de la calle. Varios camaradas han sido emboscados y asesinados por matones a sueldo”.
El policía reveló que todas las muertes están vinculadas a ajustes de cuentas y casi nunca se aclaran.
Asimismo, que en San Matías hay refugiados y gran número de prófugos de las cárceles de Brasil procesados por asesinato y narcotráfico.
El año pasado, dos brasileños fueron quemados vivos. En esa oportunidad se incrementó el número de policías, pero fue por poco tiempo y ahora sigue lo mismo según testimonios de los efectivos que pidieron el anonimato.
Fuente: El Deber