Dos hijas y cero estrías. La envidia de toda mujer no está en una imagen con photoshop, sino en el cuerpo de Cecilia Sanabria, quien a sus 37 años luce mejor que nunca. Delgada, bronceada, con la piel tonificada, mucho músculo, una amplia sonrisa, bella y más cordial que nunca, es el mejor referente del equilibrio, es la felicidad ‘andando’ porque todo le sale bien. Tiene una hermosa familia junto a su esposo Andrés Herrera y sus hijas Lucía (8) y Florencia (4), es empresaria de moda infantil con su tienda Coffee, aunque muchos la conocen por su etapa en el modelaje, cuando junto a Las Magníficas de Pablo Manzoni se consolidó como una de las mejores figuras.
Efectos duraderos. Varios años después, incluso luego de abandonar su carrera como modelo, Cecilia sigue radiante y, sin quitar mérito a la genética, esto es obra de mucho, pero mucho esfuerzo y disciplina. De esto puede dar testimonio su abdomen que, ante el frío o el calor, puede alcanzar las 200 flexiones, dentro de las dos horas diarias de entrenamiento de Cecilia y especialmente el día sábado. ¿Tortura? Para nada, nada más una forma de vida que solo puede comprender quien ya habita en ella con muchas satisfacciones, como mirarse al espejo, escuchar innumerables piropos y tener la certeza de que manda a su cuerpo y no viceversa.
“Desde hace 12 años, René Claure, el dueño del gym al que asisto me enseñó a alimentarme adecuadamente y esto es algo que agradezco a la etapa del modelaje”.
Más que músculos. El efecto radiante que produce Cecilia tiene mucho que ver con su actitud ante la vida. En vez de convertirse en niña mimada al ser hija única, ella asegura que siempre fue una persona sociable, “soy amiguera, apegada a la familia, a mis primos, tíos, primas y por supuesto a mis amigas, a las que también considero parte de mi familia; a pesar de ser única hija no he sido consentida, ni caprichosa, sino más bien realista y noble”. Esta capacidad de relacionamiento le ha servido para introducirse de lleno en el campo de la televisión, que actualmente le permite desarrollar simultáneamente una satisfactoria labor profesional y social desde el programa “Brigadas gemas” que, gracias al auspicio de varias empresas, gestiona la construcción de casas para familias de escasos recursos económicos.
En el hogar, pocos podrían imaginar a la dulce Cecilia como una mamá estricta, pero ella se encarga de aclarar, “seguramente debo ser la mano dura en casa con respecto a horarios y tareas, pero también les doy mucho amor, trato de que sean niñas muy libres, nobles y con la sensibilidad a flor de piel”. En cuanto a su rol como esposa, ya lleva 11 años de casada, “mi matrimonio es hermoso, pero no es fácil, es como regar una planta, requiere mucha tolerancia y paciencia, pero tengo la certeza de que con amor todo se supera”.//
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Hábitos
Esfuerzo, disciplina y comida sana son el secreto
De lunes a sábado Cecilia asiste al gimnasio, donde hace dos horas diarias de ejercicios, divididas entre cardio, pesas y aparatos. Su alimentación comienza temprano con café y un chorrito de leche, tostadas integrales y revuelto de claras de huevo en el desayuno; a la hora de almuerzo tiene que compartir con la familia, es decir que no se prepara una receta especial; para la cena elige pescado con mucha ensalada, “prefiero atún porque es bastante liviano”, en su heladera jamás faltan las frutas y en sus recetas opta por poca azúcar.
Otros tipsSobre el cuidado de su piel, si bien le gusta ‘piscinear’ y sacar provecho al sol, Cecilia tiene como mandamientos femeninos quitarse el maquillaje y aplicarse un suero hidratante antes de dormir; de día usa protector solar 50, consume bastante agua y se hace tratamientos faciales esporádicos en un spa. Para su cabello ha decidido tomar bastante vitamina E.//
Carismática y jovial
Hoja de vida. Cecilia Sanabria Salmón (37) está casada con el argentino Andrés Herrera, empresario de productos comestibles, es mamá de Lucía (8) y Florencia (4). Estudió comunicación social en la Universidad Privada de Santa Cruz (UPSA), fue una de las top magníficas de la agencia de Pablo Manzoni y actualmente es propietaria de la tienda de ropa infantil Coffee, además de conductora del programa televisivo “Brigadas gemas” desde donde realiza una satisfactoria labor social.
Desde hace 12 años Cecilia optó por un estilo de vida saludable, tanto en cuanto a nutrición como a ejercicios y fruto de esa disciplina es que a sus 37 años de edad mantiene una figura armoniosa, una piel tonificada y una vida en equilibrio, ya que logra canalizar sus energías a través de la actividad física, además de convertir el esfuerzo en fuente de alegrías y bienestar personal.
Fuente: www.eldia.com.bo