Distendido y visiblemente mejorado de salud, el opositor cubano Guillermo Fariñas sorprendió a amigos y seguidores al desembarcar de sorpresa el domingo en el aeropuerto de Miami en un vuelo desde La Habana.Fariñas, de 51 años, llegó acompañado por su madre, Alicia Hernández, para dar inicio a lo que anunció será una gira de dos meses por Estados Unidos y Europa. “Al fin he llegado a la capital del exilio”, dijo el expsicólogo militar cubano, actualmente periodista independiente y líder del ‘Frente Antitotalitario Unido’, según la versión de uno de sus amigos que acudió a recibirlo en la tarde del domingo.La idea del opositor es permanecer hasta la segunda semana de junio en Estados Unidos, visitando Miami, Washington, New Jersey y Puerto Rico, para luego seguir hacia Europa, pasando primero por Bruselas a recibir el Premio Sajarov otorgado el 2010 por el Parlamento Europeo y posteriormente hará escala en la capital española, Madrid, antes de volver a la isla comunista.“Vamos a demostrar que somos un solo país”, dijo el opositor en el aeropuerto, para más tarde precisar que piensa regresar a Cuba y no quedarse a residir en el exterior con su madre. “Aunque la tentación de quedarse es grande, lo cierto es que mi responsabilidad está en Cuba. Es allá a donde debo regresar y lo pienso hacer”, dijo.Fariñas, quien cursó estudios militares en la fallecida Unión Soviética en los años 70 y posteriormente pasó por el destacamento militar cubano acantonado en Angola, comenzó a ser conocido en círculos opositores cubanos hace unos cinco años por una sucesión de huelgas de hambre que estuvieron a punto de acabar con su vida.La mayor y más intensa, ocurrió el año 2010. Se extendió durante cuatro meses y fue motivada por la muerte del opositor Orlando Zapata Tamayo en febrero de ese año. Una de las exigencias de Fariñas fue la liberación de un grupo de 15 presos políticos enfermos.Sin embargo, la huelga terminó estando Fariñas hospitalizado en un centro asistencial de Santa Clara, en el centro de la isla, cuando la Iglesia Católica alcanzó un acuerdo con el Gobierno cubano, que puso en libertad a 130 ex presos, entre ellos los 52 que quedaban de los detenidos durante la llamada ‘Primavera Negra’ del 2003, una oleada represiva que condujo a la cárcel a 75 periodistas independientes y opositores.La mayoría de los 130 entonces excarcelados, salieron directamente rumbo a España donde se afincaron gracias a la incorporación al acuerdo del entonces gobierno socialista español. Al menos 14 de ellos han terminado por irse a otros países, como Estados Unidos, Chile y Alemania.Una fuente del exilio dijo que, de momento, el opositor tiene previsto un encuentro con la ‘Foundation for Human Rights in Cuba’, una entidad afín a la Fundación Nacional Cubano Americana. “Venimos a establecer contactos y lograr apoyos en el extranjero para nuestro proyecto de lucha”, afirmó Fariñas a la llegada.El domingo, antes de abordar el avión, el opositor aclaró a corresponsales extranjeros en La Habana que se desplaza a Miami, “en un viaje de trabajo invitado por organizaciones del exilio y varias personas” y que el periplo tiene como objetivo contactar a “todos los cubanos” y “debatir sobre una democratización en Cuba”.El viaje de Fariñas se produce después que hace dos meses el Gobierno cubano implementó una reforma migratoria y se une a los de otros conocidos opositores como Elizardo Sánchez Santa Cruz, de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, la líder de la Damas de Blanco, Berta Soler, la bloguera Yoani Sánchez y Rosa María Payá, la hija del fallecido opositor Osvaldo Payá Sardiñas.Sin embargo, para Fariñas, la reforma migratoria es parte de una serie de cambios “cosméticos” y no reales. “Son cambios para el público que lo está presionando, incluso la izquierda democrática del mundo y sobretodo de América Latina, para que puedan defender al Gobierno cubano para lograr que se acepte así como es. Y nosotros estamos luchando para que no se acepte como es sino que haya una democracia representativa en Cuba”, amplió el opositor a la llegada a Miami.Diario Las Américas