El ministro de la presidencia, Juan Ramón Quintana, inició el domingo una arremetida maccartista contra intelectuales y medios líderes de opinión.
La excusa encontrada por el funcionario es que algunos de los analistas incluidos en su “lista negra” trabajaron ocasionalmente en algún proyecto de desarrollo financiado por Usaid, aún cuando esta acusación no sea aplicable a todos los nombrados en su denuncia.
Es el caso de nuestro portal, que según el ministro estaría “financiado por Estados Unidos”, afirmación fácilmente desmentible y que carece de sustento alguno.
Si vemos la lista de los intelectuales a los que Quintana trata de descalificar, notaremos que se trata de profesionales en distintas áreas (la sociología, el derecho, las ciencias políticas) que ejercen con cierta frecuencia el periodismo de opinión, muchas veces cuestionando los abusos cometidos desde el poder, aspecto que sin duda será el resorte principal que habrá movido al ministro para lanzar su “caza de brujas”.
Otro tanto puede decirse respecto a eju.tv, que actualmente congrega a alrededor de 1 millón de librepensantes que acceden diariamente a sus artículos. ¿Le molesta al Ministro de la Presidencia que este portal haya dado espacio, por ejemplo, a las denuncias de la revista Veja que lo vinculan presuntamente con el narco brasileño Maximiliano Dorado?
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Evidentemente, estamos ante una nueva arremetida contra la libertad de opinión y el pensamiento crítico, que intenta imponer la autocensura mediante amenazas veladas, pero que sólo deja traslucir el talante antidemocrático de quienes detentan el gobierno de turno.
Lindante con el ridículo es la acusación a los intelectuales que en algún momento brindaron sus conocimientos a proyectos de la cooperación norteamericana, sobre todo viniendo de quien, como el ministro Quintana, fue formado nada menos que en la Escuela de las Américas…