El Gobierno de Evo Morales negó que haya presionado a su par de Brasil para cambiar a su embajador en La Paz, Marcel Biato. En tanto, desde Brasil, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, Ricardo Ferraço dijo en su cuenta de Twitter, que “seguramente vamos a evaluar con mucha atención (este tema). No pasará inadvertido”.
Gobierno niega que pidió cambiar a Biato
EN COMISIÓN DEL SENADO DE BRASIL DICEN QUE EVALUARÁN SI HUBO INJERENCIA.
Los Tiempos y Agencias
El embajador de Brasil en Bolivia, Marcel Biato, en una visita a Los Tiempos el año pasado. La Prensa Agencia.
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La ministra de Comunicación, Amanda Dávila, negó ayer que el Gobierno de Bolivia haya tenido alguna “injerencia” en la remoción del embajador de Brasil en La Paz, Marcel Biato, quien, según el diario Valor, será trasladado por presión del Gobierno boliviano que se “molestó” con la actuación del diplomático en el tema del senador Roger Pinto.
En tanto, desde Brasil, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, Ricardo Ferraço, consultado sobre su posición sobre la remoción de Biato, dijo a Los Tiempos en su cuenta de Twitter, que “seguramente vamos a evaluar con mucha atención (este tema). No pasará inadvertido”.
Por su parte, el abogado de Pinto, Fernando Tibúrcio, considera que el cambio influirá positivamente en el caso de su cliente, pues la medida devela la “suavidad” con que la Cancillería brasileña abordaba el caso y hasta justificaría que el Supremo Tribunal Federal intervenga en el caso, en el que ya se interpuso un hábeas corpus.
El diario brasileño Valor publicó en su edición del pasado jueves que Itamaraty (la Cancillería brasileña) había cedido a la “presión” del Gobierno de Evo Morales de remover a Biato, debido a que este último había provocado malestar en el Ejecutivo boliviano por sus gestiones con el senador Roger Pinto, quien en junio de 2012 se declaró perseguido político y se asiló en la sede de la embajada brasileña en La Paz.
Ante esta situación, Dávila, en conferencia de prensa, dijo ayer que el Gobierno boliviano “jamás hará ninguna presión para cambiar a ningún embajador. Cuando se ha tomado una decisión sobre algún Embajador, esto ha sido público, cuando era (una decisión) absolutamente soberana”, afirmó.
Agregó que “oficialmente” tampoco se tiene ninguna información sobre el relevo de Biato. “Nos hemos enterado sobre este posible cambio del Embajador (de Brasil) por una prensa que de manera tendenciosa ha interpretado que ha habido una presión de parte del Gobierno boliviano, lo cual rechazamos por respeto a la Presidenta (Dilma Rousseff), al gobierno y al pueblo brasileño”, dijo.
Dávila hizo referencia a la publicación de valor que señala que en marzo pasado, durante una reunión en Brasilia del ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, con el canciller de ese país, Antonio Patriota, se habría pedido la remoción de Biato a fin de facilitar una solución para el caso de Pinto, además del asunto de los 12 hinchas del club Corinthians, detenidos en Oruro por la muerte del joven boliviano Kevin Beltrán.
Por su parte, el excanciller Armando Loaiza, dijo a Radio Fides, que el caso Pinto es una “cuestión sencilla, pero se está convirtiendo en una situación política difícil”, más con el reciente anuncio de la remoción del Embajador.
“Creo que hay que tener cuidado, la República Federativa del Brasil en sus determinaciones diplomáticas es muy profesional y cuidadosa, hay que esperar la confirmación del retiro o término de funciones del Embajador, porque todavía es la opinión de un diario muy influyente, pero es mejor esperar que Brasil confirme este supuesto”, dijo.
La exautoridad aseguró que el Gobierno, con su estrategia, interpreta e incumple las normas del Derecho Internacional, las cuales se discutieron en diferentes convenciones interamericanas
Gobierno niega presiones para retiro de Biato
Relaciones diplomáticas. En Brasil no se pronuncian sobre el cambio de embajador en Bolivia
EL DEBER, La Paz
El Gobierno boliviano negó que haya presionado a su par de Brasil para cambiar a su embajador en La Paz, Marcel Biato. En esa legación se informó de que el diplomático saliente no dará entrevistas, por ahora.
“Queremos decir que el Gobierno no ha tenido ninguna injerencia, eso sería ir contra la soberanía de los Estados, ir contra el respeto que se deben tener los presidentes de los países que tienen que adoptar soberanamente las decisiones en torno a quienes los representan en los otros Estados”, afirmó la ministra de Comunicación, Amanda Dávila.
Según la revista brasileña Valor Económico, el cambio de Biato se debió a una petición del Gobierno boliviano, que se mostró insatisfecho con la gestión del diplomático por el caso del senador opositor Róger Pinto, que se encuentra asilado en esa embajada desde hace más de un año.
Según Dávila, el presidente Evo Morales y su Gobierno mantienen “con el de Brasil y la presidenta Dilma Rousseff una relación de absoluto respeto y de cordialidad, por lo tanto son solo especulaciones mediáticas”.
Embajador
Entretanto, aún no se conoce el nombre del nuevo embajador de Brasil en Bolivia. Funcionarios de la oficina del presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, Ricardo Ferrazo, indicaron que el parlamentario se encontraba en semana regional. Esa comisión debe aprobar el nombre del remplazante de Biato.
El senador brasileño Sergio Petacao, que siguió de cerca el caso Pinto, indicó que no conocía sobre el cambio de Biato. En todo caso, dijo que “espero que no haya afanes políticos”.
Dávila informó de que “oficialmente el Gobierno boliviano y el presidente no tienen información en torno a un posible nombre (de nuevo embajador) ni nada; nos hemos enterado del posible cambio del embajador por cierta prensa que de manera muy tendenciosa señala que existió una presión”, señaló
PARA SABER
Llamado
A principios de abril de este año, el Gobierno de Brasil convocó a Biato por el caso del senador Pinto y de los hinchas del Corinhtians detenidos en Oruro.
Temas
El narcotráfico, la migración, los autos robados y otros temas tensionaron la relación.