Cabo Wilma Chávez, investigadora de Propiedades de la FELCC El Alto. La uniformada denunció al suboficial Alcoba y al director de la FELCC El Alto, Ramiro Magne, por haberla presionado para que pida dinero a dos atracadores.
Página Siete / La Paz, Bolivia
La cabo Wilma Chávez hizo un seguimiento a dos atracadores desde abril de este año. Hasta entonces no había conseguido ninguna pista hasta que el abogado de los delincuentes se contactó con ella para ofrecerle dinero. Grande fue su sorpresa cuando sus jefes inmediatos, el suboficial René Alcoba y Ramiro Magne, director de la FELCC El Alto, le presionaron supuestamente para que reciba el dinero y así proteger a los delincuentes.
Un operativo de Inteligencia y la Fiscalía derivó el miércoles en la detención de Alcoba. Horas después, Magne dejó su cargo. En una entrevista en el programa Todo a Pulmón, de Cadena A, Chávez contó el jueves que era presionada por sus superiores para recibir dinero de malhechores.
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¿Cuándo empezó a investigar a los delincuentes?
El 11 de abril fui a atender un caso de robo agravado en la zona Ballivián de El Alto. Paula Churata denunció que delincuentes ingresaron a su domicilio. Un vecino que vive al frente de esa casa les tomó una fotografía (a los atracadores). Me acerqué donde el testigo y me dijo que uno de los delincuentes le disparó. Realicé varias diligencias para determinar la identidad de este delincuente y para buscar el auto también hicimos diligencias con camaradas que en un principio me apoyaron para desbaratar esta organización.
¿Qué pasó después?
El 29 de mayo de este año, el suboficial Gregorio Castro le llamó al suboficial René Alcoba para que como personal de laboratorio vayamos a ayudar en un operativo. Encabezados por Ramiro Magne, acudimos a la zona Villa Dolores. Vino el suboficial Castro y me dijo que ya encontraron el vehículo que tanto yo buscaba. Una vecina abrió la puerta del auto, sacó un aguayo donde había una cantidad considerable de dinero. La gente quería quemar el auto.
En su declaración, usted establece que no hay condiciones para trabajar en una investigación. Y que incluso sacó dinero de su bolsillo para fotocopiar identikits y pegarlos en la calle.
He elaborado panfletos para que la gente me pueda proporcionar algún dato porque yo no tenía informantes como el suboficial Alcoba, él tiene relación con delincuentes que le pueden facilitar datos para que puedan capturar. Con mis propios recursos saqué copias.
Los policías denunciados dijeron que usted actuó en venganza por llamadas de atención que recibió.
En ningún momento quise descabezar la cabeza de nadie. Aquí, el único delito que he cometido es querer esclarecer un caso. Ni el coronel Magne ni el suboficial Alcoba me han dado su apoyo.
¿No colaboraban?
Cuando pedí un vehículo al coronel Magne, me dio para que vaya a la localidad de Cucuta, llegamos todos armados esperando realizar el operativo para capturar al delincuente Johnny Ticona, cuando el suboficial Alcoba bajó del vehículo, se saludó efusivamente con el padre de Ticona, le llamó compadre. Esa situación no es porque quiero arruinar la carrera de ellos.
¿Cómo fue que llegó a recibir el dinero de estos delincuentes?
El 30 de agosto recibí una llamada del abogado (Boris) Ramos (defensor de los atracadores Johnny Ticona y Andrés Mamani. Los tres detenidos), me citó en el hotel Alexander. Yo di parte de esta situación al coronel Magne. Le hice escuchar al suboficial Alcoba la conversación. Le dije que quería darme dinero y él me dijo que de una vez, que habláramos con el coronel. Subimos a su oficina y el suboficial le dijo que el abogado ya estaba molestando, y él dijo que había que "rayar” el caso, en el sentido de pedir plata. Ellos ya tenían contacto con el abogado y éste mucho más antes buscaba a Alcoba ofreciéndole dinero. Incluso me dijo que el abogado lo buscó y le ofreció dinero, dijo que dejemos de buscar a sus clientes y dejemos morir el caso.
¿Qué dijeron los policías?
Alcoba en todo momento estuvo de acuerdo en querer pedir dinero. Cuando vio que el abogado ya estaba presentando memoriales para pedir la devolución de los vehículos, dijo que de una vez "rayemos” el caso. Magne me dijo que de una vez porque de por medio hay harta plata en este caso, que si no "rayamos”, igual pasaría en la Fiscalía.
En su declaración usted dijo que Alcoba la insultó.
Del vehículo hemos sacado un maletín de color negro, Magne me dijo que abra el maletín y encontré una caja con dinero y joyas. Pedí a laboratorio que tome fotografías y Magne dijo que yo siempre hacía sacar fotografías, que esa plata por lo menos hubiera utilizado para pagar a la banda (de música). En esa caja había 16.000 bolivianos. El suboficial Alcoba me dijo que era una zonza y que por lo menos debía bajar 1.000 bolivianos para él. Le dije que no me iba a ensuciar. Me dijo que de todas maneras ese dinero se iba a ir a la nada.
¿Cómo fue presionada por estos jefes policiales para que reciba el dinero del abogado?
El coronel Magne siempre hablaba de "rayar” el caso. Me dijo que tenemos que transar para dejar los casos, que estos casos se mueran y para que yo quite los afiches de los identikits. Ése era el trato que tenía el coronel y el suboficial con el abogado de los delincuentes. Alcoba siempre me presionaba con algunos casos. Yo le preguntaba si él no tenía algún datito para que me ayude y él me decía que Johnny (Ticona) ya tenía bigotitos. ¿De cómo se enteró? El suboficial Alcoba ya sabía cómo estaba Ticona
Hoja de vida
Trabajo La cabo Wilma Chávez trabaja como investigadora en la División Propiedades de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) desde al menos hace un año.
Superiores Chávez dependía directamente del suboficial René Alcoba y luego del coronel Magne.