Horrendo: Los médicos que vieron a la pequeña de 7 meses lloraron ante el terrible cuadro clínico. Esta nueva violación a una bebé reabre debate de castración química en Bolivia.
Senador Rojas da una semana a autoridades judiciales para sentenciar al violador de bebé
La Paz 19 de septiembre (Oxígeno).- El senador Eugenio Rojas dio plazo de una semana para que las autoridades judiciales encargadas de llevar el caso de violación de la niña de siete meses emitan sentencia de 30 años de cárcel para el sindicado del delito al haber sido hallado infraganti.
“Cuando lo has pillado con las manos en la masa, en acción, haciendo daño a la niña no puede haber presunción de inocencia, eso es lo que nos perjudica, yo desafío al Juez, al Fiscal que de aquí a una semana (haya) sentencia ejecutorial condenatoria, 30 años de cárcel (…) No hay inocencia, ahí está la retardación”, dijo Rojas.
El diputado de Convergencia Nacional (CN) responsabilizó a las presidentas del Senado y de Diputados de no considerar su propuesta de la castración química y ninguna otra de la oposición para evitar que este tipo de violaciones continúe sacudiendo a la sociedad boliviana.
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“Lamento la actitud del Movimiento Al Socialismo (MAS). Yo creo que no podemos estar de lamento en lamento, deben existir responsables y yo debo responsabilizar de manera directa a los presidentes de la Cámara de Diputados y Senado, que con una actitud miope le ha dado la espalda a la realidad y necesidad del pueblo, porque si hubiéramos mencionado la figura de la castración química dentro de las medidas estatistas, se hubiera podido evitar este tipo de hechos”, dijo.
Violación a una bebé reabre debate de castración química
El individuo que violó a una pequeña de siete meses fue enviado a prisión. Los vecinos piden una sanción dura. Los médicos y autoridades apuntan el problema al descuido de los padres.
Rolando, de 24 años (sentado), era amigo del padre. Una jueza lo envió ayer a Chonchocoro.
EL DEBER, La Paz
“Los médicos tenemos fama de ser duros de sentimientos, pero cuando intervenimos quirúrgicamente a esta pequeña lloramos ante el terrible cuadro clínico. No sé a dónde estamos llegando”, explicó el cirujano Jorge Galindo, del hospital del Niño de La Paz, al hablar del caso de una niña de siete meses que fue violada en su casa por un individuo llamado Rolando, de 24 años, supuestamente amigo del padre de la víctima, que ayer fue enviado a la cárcel de Chonchocoro.
El Gobierno se adscribió como parte civil en el proceso, mientras que las presidentas de las cámaras de Senadores y de Diputados volvieron a plantear el debate de la castración química, y castigo para los padres que descuiden a sus hijos. Tras una audiencia en la que hubo disturbios y protestas, Rolando fue enviado por un juez al penal de Chonchocoro.
La madre de la niña, que prefirió no identificarse, admitió que su marido llevó a Rolando a la casa, ella lo conoció una semana antes. Cuando se acabó la botella que compartieron, de la que ella bebió “unos cuatro vasos, no lo puedo negar”, confesó, su marido salió para comprar más alcohol. “Yo lo seguí, lo alcancé para pedirle que comprara unas galletas para la niña, que se iba a despertar y llorar de hambre”. Cuando regresó ya era tarde, porque el visitante había consumado la violación.
Bronca
El hecho generó conmoción. Hasta la tarde de ayer, cientos de personas habían firmado un libro para pedir la castración química del individuo. La gente exige pena de muerte. Una turba se reunió en el juzgado alteño para exigir pena de muerte para el individuo. La indignación se convirtió en violencia, porque la gente apedreó el juzgado y rompió vidrios.
La presidenta de Diputados, Betty Tejada, señaló que “tenemos que ver la castración química. Los padres descuidados deben ser sancionados, eso lo veremos en el tratamiento del Código Niño, Niña y Adolecente”, dijo.
La titular de Senadores, Gabriela Montaño, acotó que “este es un problema muy grave, exigimos a la Fiscalía, al Órgano Judicial que no deje dormir estos casos”, manifestó.
Al menos tres médicos del hospital del Niño señalaron que este fue el caso más grave que han visto en el último tiempo. El mismo cirujano Galindo y el director, Joseph Henau, advirtieron que se reciben dos a tres casos por semana.
Sobredosis de cocaína
Otro médico, Wilfredo Pastén, señaló que el descuido de los padres es un tema que lleva a otro tipo de casos, como el de un niño de nueve meses, que llegó con convulsiones. “Detectamos que había intoxicación por cocaína. La mamá admitió que le dieron droga para calmarlo y llegó inconsciente. Está fuera de peligro”, dijo.
El galeno señaló que son cotidianos los casos por ingestión de objetos extraños. Los niños son las principales víctimas del descuido y de los vicios de sus padres
ATRIBUYEN AL ALCOHOL LOS HECHOS VIOLENTOS
Dos médicos aseguran que el abuso del alcohol y las drogas y la crisis de la familia son los desencadenantes de los abusos contra menores.
El siquiatra y docente universitario Fernando Garitano declaró que “hay que hacer énfasis en que si bien hay problemas subyacentes como de personalidad, relación familiar, enfermedades mentales, el principal desencadenante es el abuso del alcohol y de las drogas que no es atendido adecuadamente”.
El médico señaló que el hecho de desinhibir la cabeza con estas drogas “hace que salgan y se presenten este tipo de barbaridades, es un tema muy grave”.
Los casos que se presentan, como la violación de una niña de siete meses, y de otros como aquellos en los que por descuido los pequeños llegan a los centros de salud con objetos extraños en su organismo, “son una señal de que la relación de la sociedad con alcohol y drogas es cada vez peor”.
Wilfredo Pastén atribuyó el hecho “a una terrible crisis de la familia, que antes no se notaba tanto. Se genera un descuido que luego lleva a tragedias que definitivamente se podrían evitar”, señaló el galeno.
Para saber
A la cárcel
La jueza segundo de instrucción en lo penal cautelar, Milenka Gutiérrez, determinó a las 17:30 de ayer la detención preventiva del hombre de 24 años, acusado de violar a la bebé.
La protesta
Decenas de personas se apostaron fuera del juzgado para exigir la pena de muerte para el sujeto. La tensión llegó al límite cuando lanzaron piedras y causaron rotura de vidrios.
Presión por la prensa
Primero prohibieron el ingreso de cámaras al lugar, pero luego, ante la presión de la gente, la jueza autorizó el ingreso de los periodistas y reporteros.