“No dejo de sorprenderme, el Gobierno convoca al Día de la Dignidad y el ex presidente Carlos Mesa no existe”, afirmó el exmandatario que dice estar orgulloso de haber logrado la pacificación del país en octubre de 2003 tras los violentos sucesos que dejaron muertos y heridos.
Carlos Mesa no se siente reconocido por lo que hizo: Pacificar Bolivia e impulsar la nueva agenda
La Paz, 17 de octubre (Oxígeno).- Orgulloso de haber logrado la pacificación del país en octubre de 2003 tras los violentos sucesos que dejaron 67 muertos y 400 heridos en el Gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, el ex presidente de la República Carlos Mesa Gisberth afirma que asumió el desafío de gobernar aún sin tener un proyecto político propio. El político que juró a la Presidencia el 17 de octubre, tras la dimisión de Goni, expresa que no se siente reconocido.
Diez años después de los hechos de octubre que derivó en la renuncia y huída de Gonzalo Sánchez de Lozada, Mesa destaca el crecimiento y contribución de la ciudad de El Alto en el desarrollo de Bolivia, pero principalmente su rol en la historia. Sin embargo, se muestra sorprendido porque en Bolivia se recuerda a los autores de los crímenes y que se olvida a quienes lucharon por devolverle la tranquilidad democrática al país.
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“Quienes defendemos los derechos humanos y llevamos el proceso de pacificación nos vemos obligados a cargarnos con los autores de los crímenes, no dejo de sorprenderme, el Gobierno convoca al Día de la Dignidad y el ex presidente Carlos Mesa no existe; a quienes mataron 67 compatriotas se permiten decir lo que les parece” manifestó.
Tras los hechos del 12 y 13 de octubre en El Alto, Mesa deja sólo al gobierno de Sánchez de Lozada. Se apartó del gobierno del MNR, pero se mantuvo en el cargo de Vicepresidente de la República, lo que abrió pasó a la sucesión constitucional, lo que ocurrió el 17 de octubre del 2003.
Al hablar de su Gobierno destaca varias medidas a favor del país y que le permitieron sacarlo de la crisis, pese a no tener el respaldo requerido.
“No tomé ninguna medida bajo presión, porque hubiese hecho la nacionalización que la gente quería, que no es la que hizo el presidente Evo Morales (…) Mi gobierno abrió un espacio consistente y pensado y propuesto por mí el 17 de octubre, tomé esa agenda y la cumplí en lo que pude cumplirla, porque el Congreso me bloqueó sistemáticamente el hacer lo que podía, pero no dependía del poder Ejecutivo sino del Legislativo”, dijo.
Gobierno de transición pacífica
Consultado sobre qué le faltó como gobernante o a su Gobierno, el ex mandatario responde que no le faltó valor, porque respetó la vida y así logró la pacificación del país.
“¿Qué me faltó? vocación política, organizar un partido, controlar el Congreso a través de una estructura partidaria propia o participar como partido de Gobierno en las elecciones municipales de 2004, es decir transformar en política activa y construcción partidaria lo que era un capital espectacular que yo tenía en respaldo popular, ese fue mi error, no fue la renuncia de junio y no fue el respeto a derechos humanos”, enfatizó Mesa.
Dice no arrepentirse de haber sido Vicepresidente de Gonzalo Sánchez de Lozada y mantiene su postura de ser admirador de su primer Gobierno y de creer que era el “hombre indicado para resolver la crisis económica que afrontaba Bolivia, los acontecimientos que pasaron después modificaron mi percepción personal y en definitiva me separaron del Gobierno, cosa de la que no me arrepiento”.
El segundo periodo de Gobierno de Sánchez de Lozada no fue lo que Carlos Mesa esperaba porque se dejó varios puntos que en su primera gestión fueron valoradas, como el no responder a las demandas populares.
“Primero la partidización del gobierno, que en la primera gestión había tenido una contribución muy importante e independiente de izquierda progresista contribuyó a generar ideas novedosas; segundo, la visión democrática desde un punto de vista teórico debe responder a las demandas pragmáticas y no darse cuenta de que había una presión popular a la que había que responder fue un grave error”.
Sánchez Berzaín
Sobre los derechos humanos rescata que siempre fue un fiel defensor, pero que el presidente Gonzalo Sánchez de Lozada no entendió, inclusive en la defensa de quien fuera Defensora del Pueblo Ana María Romero de Campero.
“Yo defendí a Ana María Romero de Campero y el Presidente se opuso a la defensa y la bloqueó a pesar de los esfuerzos que yo hice como Vicepresidente. Yo presioné para que el señor (Carlos) Sánchez Berzaín saliera del gobierno y el Presidente lo volvió a colocar luego en agosto y tuvimos diferencias que marcaron que estábamos en caminos y visiones diferentes”, asegura el periodista y ex Presidente de la República.
Mesa evitó entrar en debate sobre las recientes declaraciones desde Miami, Estados Unidos del ex ministro de Defensa Carlos Sánchez Berzaín, en las que lo alude y señala como que ya ambicionaba la presidencia desde enero de 2003.
“Si la sociedad democrática del siglo XXI pretende un careo entre el responsable de 67 muertes y 400 heridos y el Presidente que les devolvió la paz y respeto de los derechos humanos en Bolivia, algo está mal. En consecuencia como no estoy en disposición de entrar en un debate de esa naturaleza, espero que la sociedad me juzgará como periodista, por lo que he sido como Presidente y por lo que soy hoy, no tengo que dar ninguna explicación a quien no tengo que dársela”, respondió.
Sobre el Decreto de Amnistía que según Sánchez Berzaín persigue a autoridades y deja de lado a dirigentes “que conspiraron contra el Gobierno de Goni”, Mesa aseguró que responden a un hecho histórico y fundamental del país.
“Fueron decididos políticamente, garantizaron la paz de Bolivia y en ‘ningún caso’ (repite tres veces) dieron amnistía a personas que cometieron delitos comunes, en ningún caso. El decreto es específico y claro, se libera de responsabilidad a aquellos -según la ley aprobada el 3 de agosto de 2003-, a (quienes) colocaba como delincuentes por manifestarse y por expresar protestas en contra del gobierno”, dijo al añadir que hasta ahora se deja a interpretación de personas que sacan conclusiones equivocadas y no se lee adecuadamente el mismo.
Lo que hizo Carlos Mesa
Estos resultados económicos y políticos en el gobierno de Carlos Mesa son claves, sin ellos no se puede entender las autonomías, la nueva Constitución, las Asamblea Constituyente, “el proceso de ‘nacionalización’ que ha hecho el presidente (Evo) Morales sin las medidas que yo llevé adelante”.
1. Recuperé el derecho de la vida como lo más sagrado de los derechos de los bolivianos y respete rigurosamente contra viento y marea los derechos humanos
2. Resolví una gravísima crisis económica, la gente se olvida que lo hice en las condiciones más adversas, yo heredé un déficit fiscal del 8.1 por ciento y un crecimiento del menos uno por ciento del país, yo dejé Bolivia, cuando deje la Presidencia con dos y medio por ciento de déficit, duplicadas las exportaciones y un crecimiento cercano al 4 por ciento.
3. Hice el referéndum de hidrocarburos sin el cual no hay ninguna nacionalización posible, ¿qué logró el referéndum de los hidrocarburos? recuperar la propiedad para el Estado Boliviano, refundar YPFB e incrementar los impuestos que se incluyeron en la Ley de Hidrocarburos que yo no promulgué, no por esos puntos sino por otras incongruencias que tenía.
4. Convoqué a una Asamblea Constituyente, mandé el proyecto de ley que me fue bloqueado sistemáticamente por el Parlamento.
5. El estatuto autonómico, convoque a elección directa de prefectos , establecí medidas de incentivo tan interesantes como las ferias a la inversa, más el desarrollo de proceso de infraestructura de carreteras que inicié con el asfaltado de Cotapata – Santa Bárbara, Potosí Tarija y la reposición del puente once.