Familiares de los tres manifestantes fallecidos en noviembre de 2007 en Sucre durante las protestas contra la Asamblea Constituyente lamentaron este lunes la "indiferencia" y "frágil memoria" de autoridades y ex dirigentes regionales que, según dijeron, estuvieron ausentes de los actos preparados con motivo del sexto aniversario de esos hechos.
"¡Qué memoria tan frágil de muchas personas! Muchos se han vendido por intereses partidarios, cargos políticos y demás… pero será la población la que juzgue", se lamentó Juan Cardozo, hermano de José Luis Cardozo, una de las víctimas de la violencia política.
Aunque Cardozo eludió señalar nombres, sostuvo que "muchos se aprovecharon en coyunturas políticas para alcanzar concejalías, ser asambleístas, diputados, senadores aprovechándose del dolor, del llanto que nos tocó vivir. Eso no lo aceptamos", manifestó.
Estos días, los familiares de los fallecidos promovieron algunos actos de homenaje a los caídos en las protestas, entre los que destacaron una misa de campaña en el cementerio General y otras actividades artísticas y culturales.
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A estos actos asistieron sólo algunas ex autoridades y dirigentes, entre ellos el ex presidente del Comité Interinstitucional, Jaime Barrón, y el delegado de la Alcaldía, José Miranda, quien estuvo en representación del alcalde Moisés Torres, cuya ausencia no fue aclarada.
"Lo que más me interesa, al margen de la recordación, es la eucaristía. Ellos (las víctimas) viven de la eucaristía, de la oración, de las flores… ellos viven de eso, allá en la gloria del Señor", remarcó Cardozo.
Por otra parte, los familiares de Gonzalo Durán, José Luis Cardozo y Juan Carlos Serrudo pidieron al Fiscal Ramiro Guerrero "mayor celeridad en el proceso", y señalaron que el Ministerio Público "tiene los mecanismos a su alcance" para esclarecer esos hechos.
Asimismo, indicaron que las investigaciones no solamente deben limitarse al ex ministro de Gobierno, Alfredo Rada, y otros jefes policiales de la época, sino que debían extenderse a otros protagonistas políticos de la Asamblea Constituyente, entre ellos a su ex presidenta Silvia Lazarte y al actual gobernador de Chuquisaca, Esteban Urquizu, por entonces también asambleísta del MAS.
Las primeras recordaciones de esos luctuosos hechos se habían caracterizado por una masiva participación de dirigentes, autoridades y población en general, pero con el paso de los años esta fecha parece ir perdiendo importancia en la memoria de la colectividad chuquisaqueña, según percibieron los familiares de los tres activistas caídos.
Entre el 24 y el 26 de noviembre de 2007, las protestas contra la aprobación de la Constitución Política del Estado dejaron un saldo de tres muertos y al menos trescientos heridos, algunos de ellos de gravedad y con secuelas físicas de por vida.
Fuente: El Deber