Roger Mario López Justiniano*
Cada cierto tiempo aparecen en la opinión pública menos informada –y peor aún, en la opinión ‘profesional’- algunos mitos en materia económica que, con dudosa intención, provocan lecturas equivocadas de la realidad y justificaciones para políticas ineficientes.
Uno de ellos y de los más grandes (repetido hasta el cansancio) es el slogan de que exportar es ‘bueno’ e importar es ‘malo’.
Sin embargo, ¡exportar es puro costo!, nos cuesta el trabajo y los recursos que destinamos para ello o bien nos cuesta tener que privarnos de consumir internamente para poder llevar esos recursos a otros mercados. Por otro lado, ¡importar es puro beneficio! ya que esto equivale a consumir más internamente, sin incurrir en costos de trabajo o recursos, o bien, a producir menos (ahorrar materias primas, tiempo, etc.).
Decir lo contrario, -que producir es puro beneficio y consumir es puro costo-, sería como alegrarse cada vez que tenemos que lavar platos y molestarnos cada vez que compramos una entrada para el cine.
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Por lo tanto, lo ‘bueno’ está en consumir (importar) y lo ‘malo’ en producir (exportar). Hay que añadir que así como uno tiene que ir a trabajar todos los días para poder comprarse lo que le gusta, también uno tiene de alguna forma que producir para poder darse el gusto de consumir, en otras palabras, exportar es el costo que nosotros pagamos por importar y, si queremos sacarle el máximo de beneficio a esta operación, se debe exportar sólo lo que genere un mayor excedente para la sociedad.
Este slogan viene acompañado normalmente con un ‘hay que fomentar las exportaciones no tradicionales’, esto sería equivalente a querer que Jennifer Salinas (campeona mundial de boxeo) juegue tenis o a que nuestro equipo de Raquet se dedique a la natación. Si vamos a exportar (puro costo) lo menos que se puede pedir es que se exporte los bienes que generen un mayor excedente, esto es los ‘tradicionales’, ya que si los ‘no tradicionales’ no se exportan debe ser, en ausencia de distorsiones, que no somos muy buenos para producirlos.
*Estudiante de Economía