¿Se puede morir de risa?


risasEs una de esas expresiones que pensamos no podrían ser literales. De hecho, en muchas ocasiones las utilizamos en nuestro día a día para expresar que algo nos da mucha risa, que de verdad nos ha parecido un episodio que nos hace gracia y, por lo general, nos hace sentir felices. Por lo tanto, por pura lógica, podríamos pensar que el significado literal de morirse de risa no existe. Pero ¿y si te digo que sí hay gente que se murió por reírse?

Morirse de risa, literalmente

Lo cierto es que cuando echamos un vistazo a la historia, nos damos cuenta de que no son pocos los casos de personas que en principio habrían muerto de risa. Así de literal. En realidad, como vas a ver a continuación, el término morirse de risa se asocia a muchos síntomas que la risa nos produce en el organismo, y no al mero hecho de reírnos en sí.



La risa, cuando la vivimos, provoca un montón de cambios en nuestro organismo que, en un primer momento, son todos positivos. De hecho, reírse causa cambios hormonales en nuestro organismo, contraemos todos los músculos en nuestro cuerpo, aumenta nuestro ritmo cardíaco, y si no somos capaces de frenarla a tiempo, pueden llegar colapsos bastante más graves. En muchos casos, la risa se asocia a asfixia y al arresto cardíaco en los casos documentados por muerte con esta causa.

Las causas tras la muerte de risa

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

Lo que te estamos contando no es motivo para no seguir sonriendo. De hecho, no se trata de algo común lo de morir de risa. Sin embargo, aún pese a ello, las personas que lo han sufrido han vivido episodios en los que no podían respirar por una obstrucción de las vías respiratorias, frenadas en seco o aceleración brutal del pulso cardíaco y otras dolencias, como por ejemplo inflamación del hipotálamo, cataplexia o reflejo Bezold-Jarisch.

En muchos casos de quién murió de risa, tras esas carcajadas brutales se encontraban otras enfermedades. Sobre todo, la más común ha sido la relacionada con deformaciones en la médula oblongata del cerebro, que causa ataques de risa que no se pueden controlar.

Y ahora nos toca seguir riendo y disfrutar de las muchas ventajas de las carcajadas, Pero sí que podemos presumir de saber que morirse de risa no es solo una frase hecha.

Fuente: www.imujer.com


×