La gente, como el vino, debe mejorar a medida que envejece. Lamentablemente, muchas personas tienen miedo a envejecer en un mundo obsesionado con que uno debe lucir joven y hermoso, haciendo que la gente sienta ante este hecho natural.
Sin embargo, resulta más fácil aceptar el envejecimiento cuando te das cuenta que está lleno de ventajas. Echa un vistazo a estas grandes razones para dejar de temerle el envejecimiento y descubre por qué son llamados los “años dorados”.
1. Te vuelves más sabio
La sabiduría realmente viene con la edad. La vida se compone de altos y bajos, y requiere más paciencia y prudencia. Cuando envejeces puedes utilizar tus experiencias y habilidades para manejar todos los problemas que se te cruzan en el camino. Por otra parte, los sabios tienen menos miedo a las pérdidas y saben cómo luchar contra muchos temores. La sabiduría te ayuda a tomar decisiones y mantenerte sereno en diversas situaciones.
2. Adquieres experiencia
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Cuanta más edad tienes, más maduro y experimentado te vuelves. Cada día aprendas a vivir y a superar diferentes obstáculos de la vida con dignidad. El envejecimiento es una especie de bendición, y debes admitir que la vida está llena de hermosos años y momentos.
3. Sabes quién eres
Por lo general, toma mucho tiempo conocerse a sí mismo. Tienes que fijar prioridades y averiguar quién eres realmente. Y es importante conocerse a sí mismo en un nivel profundo si quieres desarrollar el sentido de autenticidad.
Al pasar los años, descubres nuevos rasgos de tu carácter, tanto aspectos positivos como negativos. Y finalmente uno se siente mejor cuando llega a conocer acerca de la verdadera naturaleza de su mundo interior.
4. Eres más interesante para los demás
Tu sabiduría y experiencia puede ser útil a otras personas también. Puedes ofrecer algún consejo interesante y valioso en diferentes situaciones de la vida. Y tus ideas y experiencias pueden cambiar la vida de un amigo para mejor.
Las personas mayores están más en contacto con la espiritualidad y las prioridades que tienen verdadera profundidad. Y poder compartir tus conocimientos con la generación más joven es de real ayuda.
5. Te sientes más cómodo
Es necesario entender que se necesitan muchos años para sentirse cómodo con uno mismo. Debes vivir en paz contigo mismo y deshacerte de las constantes contradicciones. A medida que envejeces, te vuelves más maduro y comienzas a respetar tus decisiones. La comodidad interior es la base del amor propio y el desarrollo personal.
6. Has cumplido tus sueños
Otra razón más para no temer el envejecimiento es que los años y la madurez a menudo ayudan a alcanzar el éxito. Cuando tienes éxito en algo, tiendes a seguir cumpliendo tus sueños y metas. ¡Es maravilloso disfrutar de tus logros!
7. Tu vida tiene seguridad
Cuando te vuelves mayor consigues muchas cosas que no tenías cuando eras joven. En general, consigues cosas como respeto, dinero, amigos de verdad y quizás hasta tu propia casa. ¿Qué otra cosa puede ser mejor?
Claro, también está el amor. Si tienes amor en tu vida entonces estarás absolutamente feliz y seguro. Y a esta altura de la vida ya sabes que esta seguridad requiere de muchos años y mucho trabajo.
Como ves, envejecer no es tan aterrador como parece, sino que tiene sus ventajas y desventajas, como todo en la vida. La clave es afrontarlo con optimismo y respeto.
Fuente: www.imujer.com