Soporífero tedio futbolero


Manfredo Kempff Suárezmanfredo-kempff-21Nuestro fútbol profesional está de capa caída; anda muy mal. Ir al estadio ya se ha convertido en una tortura, salvo para los verdaderos fanáticos a quienes el juego les importa menos que chillar, beber, y lanzar bengalas. Es mejor, por tanto, sentarse cómodamente frente al televisor y ver al Real Madrid con Cristiano Ronaldo, a Messi en el Barcelona, o  Robben en el Bayern. Eso, quienes tienen televisión por cable. ¿Pero y nuestros compatriotas pobres que están destinados a ver el canal del Estado? A ellos sí que debiéramos compadecerlos. No sólo porque no puedan ver la liga española, italiana o argentina, sino porque todas las semanas – a veces dos o tres veces semanales – tienen que ver jugando fútbol a S.E.Ese debe ser uno de los abusos más grandes, entre muchos, que comete la propaganda del Estado Plurinacional: condenar a la gente con menos recursos al sopor de ver patear pelota a S.E. He tenido la curiosidad de ver por unos minutos algunos de esos partidos y lo cierto es que S.E. ya no está para esos trotes. Es muy lerdo y sólo camina en la cancha. Seguramente que en sus tiempos de dirigente cocalero, hace 30 años, era rápido, arremetedor y “faulero”. Pero, ahora, con 50 largos, no da pie con bola aunque todo el Equipo Presidencial juegue para él. Hasta los penales los yerra. Además de que los rivales se cuidan de tocarlo, no lo marcan, porque el rodillazo vengativo ya lo vio el mundo entero.No queremos entrometernos en la vida privada de S.E. porque es de mal gusto y él desde hace tiempo la lleva como quiere, aunque lejos del Palacio. Está muy bien, además, que S.E. practique deporte, porque eso lo relaja. Pero no podemos menos que advertir a quienes lo animan a jugar, que lo reflexionen para que no aburra tanto a la gente. Es que se trata de un verdadero atropello para alguien que desea distraerse y se encuentra con que el Equipo Presidencial está goleando a algún equipito de pueblo y el número 10 está en pleno disfrute a costa de los somnolientos telespectadores. El Estado, si quiere hacerle una gauchada a los menos favorecidos, podría pagar algunos partidos de las ligas europeas o sudamericanas, pero no obligarlos al tedio.Seguramente que en la Casa Grande del Pueblo construirán un lindo coliseo para que S.E. se distraiga. Sería aconsejable que no transmitan los partidos en directo por TV7, porque es muy costoso. Más bien que la entrada sea gratis y que acuda a ver a S.E. quien quiera. No faltará algún gil por ahí.El Deber – Santa Cruz