La dramática agenda política 2015


Carlos Cordero CarraffaCORDERO1Si bien es importante pensar estratégicamente en el país que aspiramos consolidar para 2025, cuando Bolivia conmemore dos siglos desde su dramática insurgencia, es oportuno reflexionar acerca de los temas y dilemas del año que empieza, pues el modo en el que sean abordados nos darán pistas de cómo podría ser Bolivia dentro de 10 años en el bicentenario de su fundación.En el primer mes de 2015 se dará inicio a un tercer periodo de Gobierno del presidente Evo Morales. Maliciosamente, el equipo gubernamental de propaganda sostiene que el 22 de enero de 2009 se produjo la refundación de Bolivia, cuando en realidad lo que se hizo fue rebautizar ‘oficialmente’ al Estado boliviano como Plurinacional, en sustitución de denominaciones no oficiales como Estado colonial, republicano, liberal, oligárquico, nacional o neoliberal. Además de festejar los balbuceantes primeros años del Estado Plurinacional, conoceremos a los hombres y mujeres del presidente que conformarán el gabinete. Un equipo ministerial que definirá las políticas públicas de los próximos años. Del éxito o fracaso de la gestión ministerial dependerán los futuros escenarios políticos.El segundo gran evento que marcará la agenda de los próximos cinco años lo constituyen las elecciones departamentales y municipales. De las políticas cooperativas o de conflicto entre los gobiernos nacional, local y departamental dependerán los éxitos o fracasos tanto del Gobierno como de la oposición política.Sin fecha aún conocida, el evento más importante para el país y el mundo católico será la presencia del papa Francisco entre nosotros. El encuentro del líder espiritual de la Iglesia católica universal con las autoridades políticas de Bolivia puede sellar el fin de las agresiones de algunas autoridades gubernamentales contra la Iglesia católica boliviana y, lo más importante, el inicio de relaciones de cooperación y colaboración, entre ambas instituciones, en múltiples ámbitos, como el de la educación, la salud, los hogares de atención de ancianos, los siquiátricos, la atención de niños en situación de abandono, adolescentes y mujeres, así como todo tipo de drogodependientes. Obras sociales que estando a cargo de religiosos y religiosas de la Iglesia católica hoy se encuentran en una situación crítica debido a la indiferencia estatal.La presencia de Francisco en Bolivia puede promover un cambio auspicioso en la tensa relación ahora existente entre Estado e Iglesia y así establecer una nueva agenda por el país por la próxima década.El Deber – Santa Cruz