Cometió cuatro faltas en el contrato. El banco brasileño no previó la consulta previa a indígenas, se observó la licitación y la estatal boliviana ABC no evaluó el impacto ambiental o las consecuencias futuras.
Financiador de vía por Tipnis conocía riesgo ambiental
- Construcción del tramo I de la vía por el Tipnis, en la población de Isinuta, en una visita realizada a fines de 2015. | Daniel James
Tres organizaciones civiles demuestran que el Bndes de Brasil conocía los riesgos sociales, ambientales y de derechos humanos que rodeaban al proyecto carretero por el Tipnis antes de firmar el contrato de financiamiento, pero los eludió al evaluar el cumplimiento de las leyes bolivianas, según el Cedla.Las organizaciones de la sociedad civil Conectas Direitos Humanos, de Brasil; el Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla), de Bolivia; y Global Witness, con sede en Londres, presentaron en octubre pasado una demanda ante la Oidora del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (Bndes), de Brasil, Ma. Carolina Capistrano.En virtud a esa demanda y con base en la Ley de Acceso a la Información de Brasil, pudieron acceder a documentos e información relativa al proyecto de la vía por el Tipnis, cuyo análisis demuestra que el Bndes cometió irregularidades en el proceso de “evaluación de cumplimiento” de la legislación boliviana y “eludió considerar las numerosas ilegalidades y violaciones a derechos humanos”, según información difundida por el Cedla.Enumera entre esas ilegalidades que no se realizó consulta a las comunidades indígenas, lo que “debió obligar al Bndes a cuestionar el proyecto”, ya que existe legislación boliviana y convenios internacionales que obligan a hacer consulta previa.Señala también que la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) no realizó una Evaluación de Impacto Ambiental del proyecto antes de licitar su construcción, hecho que vulneró las normas de inversión pública de Bolivia que obligan a contar con un estudio Técnico, Económico, Social y Ambiental (TESA) del proyecto para acceder a financiamiento externo e iniciar la etapa de ejecución.El proceso de licitación fue dado a conocer en junio de 2010, pero el Bndes no lo consideró en el análisis interno antes de dar curso al financiamiento.Además, señala el Cedla, los Estudios de Evaluación de Impacto Ambiental de los tramos 1 y 3, realizados después de contratar a la constructora OAS (actualmente investigada por casos de corrupción en Brasil y Perú), “fueron deficientes e incompletos (…)”; tampoco muestran que no hubo un proceso válido de consulta a los indígenas.En 2012, el Bndes canceló el contrato por 332 millones de dólares para financiar la carretera, pero sólo después de que el Tipnis fue declarado zona intangible por ley, en octubre de 2011.Estas vulneraciones “continúan generando dudas sobre la capacidad de uno de los mayores bancos de desarrollo del mundo para evaluar los riesgos sociales y ambientales de los proyectos que financia fuera de Brasil”, señala el documento del Cedla.VÍA EN CURSO POR LOS EXTREMOSEn junio de 2015, el Gobierno informó que inició la construcción de la plataforma en la carretera San Ignacio de Moxos-Santo Domingo (Beni), que está dentro del Tipnis. Se informó que la inversión en ese trazo es de 144 millones y va de San Ignacio de Moxos a Puesto Laguna, Puente Loco, Puerto Germán Busch, Monte Grande y termina en Santo Domingo.En tanto, el tramo I se construye desde el año pasado y está a cargo de la empresa AMVI y de la Empresa Boliviana de Construcción, dependiente del Ministerio de Obras Públicas.La entrega estaba prevista para este mes.CAMBIO “INSUFICIENTE”El Cedla señala que a partir del caso Tipnis, la política socioambiental del Bndes fue objeto de reformulaciones y la última fue presentada en noviembre de 2015; pero para los demandantes es “insuficiente, esencialmente porque no incluye ningún requisito concreto que obligue a quienes toman las decisiones, a prevenir y evitar las violaciones a los derechos humanos”.
BNDES cometió cuatro faltas en el contrato de la vía por el TIPNIS
El banco brasileño no previó la consulta previa a indígenas, se observó la licitación y la ABC no evaluó el impacto ambiental o las consecuencias futuras.Archivo Página Siete. La marcha de indígenas que rechazó la vía por el TIPNIS.Página Siete / La PazEl Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil cometió, al menos, cuatro irregularidades en la firma del contrato con el Gobierno de Bolivia para la construcción de la carretera a través del TIPNIS, según análisis presentado por el CEDLA.Los puntos fueron identificados tras el análisis de los documentos obtenidos a partir de la Ley de Acesso a la Información de Brasil (LAI) e información relativa al proyecto en Bolivia que fueron analizados por tres entidades, entre ellas el CEDLA.»No se realizó la consulta a las comunidades indígenas del TIPNIS, situación que debió obligar al BNDES a cuestionar el proyecto”, es la primera de las irregularidades identificadas.El Convenio 169 de la OIT, la Ley 1257, la Declaración de las Naciones Unidas sobre Pueblos Indígenas y la Ley 3760 obligan a realizar una consulta previa a los pueblos indígenas.El segundo da cuenta de que la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) no realizó una Evaluación de Impacto Ambiental del proyecto antes de iniciar el proceso de licitación para la construcción de la carretera.»Con este hecho se vulneraron las normas de inversión pública de Bolivia que obligan a contar con un estudio Técnico, Económico, Social y Ambiental (TESA) del proyecto para acceder a financiamiento externo e iniciar la etapa de ejecución”, agrega el análisis del CEDLA.El tercero tiene que ver con el proceso de licitación para la construcción de la carretera. «Tal como detalla la investigación oficial (auditoría) realizada por la Contraloría General del Estado Plurinacional de Bolivia, fue dado a conocer en junio del 2010 y el BNDES obvió su consideración en el análisis interno realizado”, según la nota.El cuarto esta relacionado a los Estudios de Evaluación de Impacto Ambiental de los tramos 1 y 3 al norte y sur del TIPNIS, realizados posteriormente a la contratación de la empresa.Ellos «fueron deficientes e incompletos, no establecieron ni analizaron a profundidad los potenciales impactos negativos futuros que provocaría la construcción de la carretera. Tampoco muestran la no implementación de un proceso válido de consulta a las comunidades indígenas”.Con ello, se «demuestran que durante su participación en el proyecto, el banco cometió irregularidades en el proceso de ‘evaluación de cumplimiento’ de la legislación boliviana, y eludió considerar las numerosas ilegalidades y violaciones a derechos humanos”, aseveró el análisis del CEDLA.Contrato roto y denuncias de corrupción
- Inusual En 2012, BNDES de Brasil adoptó una medida poco usual: canceló un contrato por 332 millones de dólares destinado a financiar la construcción de la carretera que debía atravesar y dividir el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro-Sécure (TIPNIS) en la Amazonia boliviana tras las protestas.
- Análisis Conectas Direitos Humanos de Brasil, el CEDLA y Global Witness de Londres analizaron los textos
- Corrupción BNDES financió las obras en la gestión de Lula, construidas por OAS, Odebrecht, Andrade Gutiérrez y otras vinculadas al caso Lava Jato por el que se juzga a Lula.