El presidente Evo Morales (o alguno de sus asesores de prensa) escribió en su cuenta oficial de Twitter que “quien se esconde o escapa es un delincuente confeso. NO es un perseguido político”, añadiendo además: “He sido procesado desde Víctor Paz Estenssoro hasta Tuto Quiroga y no me escapé ni me escondí. Les gané con la verdad”.Lo que olvida decir Morales es que en la época en que él fue acusado existía una justicia más independiente que la actual, particularmente un Tribunal Constitucional realmente autónomo, así como mayores garantías del debido proceso que las que rigen hoy en día.Lo cierto es que, en este y otros aspectos, el caudillo cocalero usó los mecanismos de la democracia para protegerse y subir al poder, para luego desmontarlos sistemáticamente.Prueba de la inexistencia de las garantías propias de un Estado de Derecho es la situación del abogado Eduardo León, quien tras ser beneficiado por orden judicial con medidas sustitutivas es retenido en prisión con diversas e inverosímiles excusas.De acuerdo a datos del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, a septiembre de 2013 existían 774 exiliados bolivianos en distintas regiones del planeta, número que no ha dejado de crecer en los siguientes dos años y medios, por lo que la cifra total podría estar ya en alrededor de 800…[email protected]