La actriz acusa a su exmarido Johnny Depp de maltrato y ambos protagonizan uno de los divorcios más tóxicos
Johnny Depp puso a Amber Heard en el mapa. Como actriz y como esposa. Ahora, amigos y seguidores de una pareja que apenas duró 15 meses casada intentan saber qué ha ocurrido. Si la intérprete y modelo es la mujer manipuladora, falsa y petulante que algunos describen desde el bando de Johnny Depp. O si la joven tejana a la que el actor saca más de 20 años es la víctima de los abusos y malos tratos de una estrella conocida por sus excentricidades.
Pocos conocían su nombre antes de que Depp la seleccionara como protagonista de Los diarios del ron (2011), donde el talento y la belleza de Heard se impuso por encima de otras actrices como Scarlett Johansson. El Jack Sparrow de Piratas del Caribe también la prefirió como mujer, cayó perdidamente enamorado de alguien a quien describió como su “Lauren Bacall” o como “un encanto del sur” y que acabó convirtiendo en su esposa. Eran más los que por aquel entonces conocían su cuerpo: ella era una habitual entre las listas de las mujeres más sensuales de revistas como Maxim o FHM. Ser modelo le dio de comer, un paso obligado para pagar facturas cuando decidió independizarse a los 17 años poniendo desde Austin rumbo a Nueva York y Los Ángeles. Le gusta describirse como un espíritu independiente, “curiosa de corazón y abierta de mente”. “Como cualquier padre medio decente, los míos no apoyaron mi decisión, pero por lo joven que era”, recordó sobre esos años a este diario. Su rebeldía también se tornó contra Dios, al que esta mujer criada en el catolicismo le dio la espalda para declararse atea tras la muerte de su mejor amiga en un accidente de tráfico.
Puede que no le falte razón a Terry Gilliam cuando dice eso de que Amber Heard es mejor actriz de lo que pensaba. El director y actor de los Monty Python hizo el comentario para apoyar a su amigo Depp. Pero lo cierto es que la carrera de Heard como actriz no ha hecho más que empezar. Tiene bastantes papeles pero de poca monta, de adolescente en películas de horror (El padrastro, 2009), de zombi (Bienvenidos a Zombieland, 2009, y Furia Ciega, 2011) o como una joven Charlize Theron en En tierra de hombres (2005). Incluso después de Los diarios del ron, Heard no ha conseguido superar ese techo de cristal que oprime a las mujeres en Hollywood dejándolas en el papel de esposas de, de novias de, de mejores amigas en películas como 3 días para matar (2014), Magic Mike XXL (2015) o La chica danesa (2015). “Lo he repetido hasta la saciedad, que mi mayor lucha en esta industria es tener las mismas oportunidades que mis compañeros varones”, declaró a EL PAÍS. Una batalla en la que va ganando posiciones ahora que ha firmado como uno de los superhéroes de La liga de la justicia.
Su otra lucha, la de no verse encasillada en su vida sexual, todavía tiene para rato. “No me gustan las etiquetas. En todo lo que se refiere al amor soy muy abierta”, declaró la actriz cuando se declaró como bisexual en 2010 durante las celebraciones del 25º aniversario de la Liga de Gais y Lesbianas contra la Difamación. Si Depp ya contaba con un divorcio en su vida, además de un par de separaciones sonadas, en el historial amoroso de Heard está su relación con la fotógrafa Tasya Van Ree. Nunca llegaron a casarse porque no es posible en EE UU, pero en 2008 la modelo cambió su nombre al de Amber Van Ree y ambas celebraron lo que podría considerarse como una boda aunque sin validez legal. La bisexualidad de la actriz es uno de los puntos que más ha dado que hablar en este tumultuoso divorcio. Del equipo Depp se han alzado en su defensa voces masculinas como la de Gilliam, los actores Paul Bettany o Mickey Rourke y el cómico Doug Stanhope, entre otros, además de su expareja Vanesa Paradis y su hija. En el bando Heard están Raquel Rose Pennington, su amiga desde hace 13 años y que prestó declaración ante el juez en favor de la actriz; su antigua amante Van Ree o la también fotógrafo y columnista de MTV iO Tillet Wright, además de Evan Rachel Wood y Cara Delevingne. Un grupo de amigas que responderían fácilmente a la descripción que Heard hizo de su vida antes de casada cuando era “una chica super relajada, moderna y normal que vivía rodeada de gente que salía con otras chicas”.
Cuando el pasado año un periodista le preguntó cómo le había cambiado la vida su matrimonio con Depp, la actriz sacó las uñas asegurando que su independencia nunca se había visto mitigada por una relación. “Yo soy quien soy. Siempre”, dijo entonces. Sin embargo, el polémico divorcio ha dejado al descubierto a una joven que además de hablar castellano y gustarle las armas, las joyas y los coches de carreras tuvo sus dudas antes de casarse. Pero pudo el encanto de Depp, a quien Heard describió como “enigmático e irresistible”. Ahora todo suena a dinero. Le reclama al actor sus dos perros, una ayuda mensual de 44.700 euros, el penthouse de Los Ángeles en el que vive, un Range Rover y los costes legales de un divorcio que podría reportarle cerca de 18 millones de euros. Depende de cómo se mire, una elevada suma por 15 meses de matrimonio o bagatelas frente a los 358 millones a los que se eleva la fortuna de una de las estrellas mejor pagadas de Hollywood.
Fuente: elpais.com