La declaración que el martes hizo en La Paz el presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), Rolando López, con un ultimátum para el técnico de la selección nacional, puso de cabeza el humor de Julio César Baldivieso, quien hoy asistirá a una conferencia de prensa programada para las 16.00 horas en el hotel de concentración de la Verde en Orlando.
López dijo que la Copa “es la prueba final” para Baldivieso y que “ya no hay más excusas” sobre el rendimiento de la selección bajo su mando. Anunció que el Comité Ejecutivo de la FBF analizará el futuro del entrenador después del torneo.
“Veremos cuál es el desempeño global de la selección y a la vuelta tendremos que tomar decisiones también”, agregó.
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Baldivieso se enteró acerca de lo que dijo López el mismo martes al leer sus declaraciones en la página web de La Razón, y de inmediato cambió su semblante y evidentemente estaba enojado.
Según trascendió, le reclamó a Marco Ortega, vicepresidente de la FBF y quien preside la delegación en Estados Unidos, por los dichos de López.
“Con lo que dijo el presidente mejor no digo nada”, respondió al paso el técnico cuando el enviado especial de Marcas a la Copa intentó recabar una opinión del entrenador sobre el tema.
Sin embargo, por la noche accedió a una entrevista vía Skype con el programa No Mentirás de la Red PAT, y su respuesta fue: “que los dirigentes también den examen”.
La relación del técnico con el principal dirigente de la FBF quedó resquebrajada. López tenía previsto viajar ayer a Estados Unidos para sumarse a la delegación. Después de lo que dijo en La Paz aún no habló con Baldivieso. Recién hoy estarán “cara a cara”.
Unos meses antes, Baldivieso tuvo un encontrón con el secretario general de la FBF, Wálter Torrico, a quien señaló por intentar desestabilizar su trabajo como seleccionador nacional.
El martes, Torrico acompañó a López, quien asistió a una reunión con el presidente del Estado, Evo Morales Ayma.
En una radioemisora, el dirigente, quien además es presidente de la Asociación de Fútbol de La Paz (AFLP), adelantó que en caso de que la federación decida rescindir el contrato con Baldivieso ya se ha volcado la mirada hacia el mercado argentino en busca de un entrenador aunque, de no ser factible contratar a uno de ese país, en Bolivia hay por lo menos dos candidatos.