7 cosas asquerosas que pasan cuando no te cambias la ropa del gimnasio


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Courtesy by Victoria’s Secret

 No hay nada más cómodo que usar tus pantalones de yoga como pijamas por eso no nos extraña que después de una clase de domingo vayas directo a la cama usando la prenda en cuestión.Ahora, lo que no sabes, es que al hacer esto, estás cayendo en un hábito muy repugnante.  «El segundo enemigo de la piel es el aceite», dice la fundadora de ZO Cuidado de la piel y dermatóloga Zein Obagi (el sol es el número 1).  «Siempre que te ejercitas, estás aumentando la producción de aceite, así que siempre debes lavar tu cara y cuerpo inmediatamente después de entrenar».¿Y qué pasa si prefieres ir primero por un café con tus amigas antes de ducharte?  Pues te contamos que pasa:



  1. Acné quístico de cuerpo

«El acné es causado por los poros tapados con aceite, células muertas, y otros desechos» explica la dermatóloga Dendy Engleman a la revista Seventeen.  «Sudar no solo mantiene los poros obstruidos, además atrae el polvo y el sucio.  Estos elementos se adhieren más a la piel cuando se encuentra humeda y como resultado, se acumula ocasionando un brote».

  1. Conjuntivitis

Esa bacteria no solo se queda en los lugares donde sudaste.  «Si alguna vez dejaste el gimnasio con un ojo rojo y te despertaste al otro día con el ojo hinchado sin saber por qué, es posible que el gimnasio y tu ropa deportiva hayan transferido la bacteria a tu zona ocular» dice la Dra. Dendy.

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  1. Infecciones bacteriales

«Cuando no remueves las prendas húmedas y calientes le das a las bacterias la oportunidad de esparcirse y florecer en tu cuerpo» advierte la Dra. Engelman.  Y tu gimnasio está lleno de bacterias.  No solo puedes introducer nuevas bacterias en tu cuerpo al tocar las pesas, la caminadora, y los lockers del gimnasio; cuando usas por tiempo prolongado tu outfit de ejercicios le permites a esas bacterias que crezcan, aumentando el riesgo de infecciones como estafilococos, que pueden ser peligrosos si tienes una herida abierta.

  1. Infecciones por hongos

Al permanecer en la ropa mojada puedes fomentar las infecciones por hongos, comenta la experta.  Al igual que las infecciones bacterianas, el contagio por hongos puede ser fácilmente causado por no proteger tu cuerpo y controlar su ambiente, como seguir en tu ropa de gimnasio una vez finalizada la sesión.  «Cuando la barrera protectora del cuerpo se ve comprometida, permite el crecimiento excesivo, como las infecciones por hongos».La galeno Monva De, está de acuerdo con darte un baño tan pronto puedas, o al menos usar toallitas limpiadoras.  «¡Tuve un paciente que tenía una infección de hongos con la forma de su sostén deportivo! Porque iba a trabajar o a cenar después de entrenar, en vez de ducharse».

  1. Tienes olor persistente

¿Brunch después de Crossfit? No tan rápido.  «Las áreas que sudan mucho, como las axilas, son una importante zona de cultivo para las bacterias en la piel y en los folículos del cabello» dice la dermatóloga Tsippora Shainhouse.   Esta pestilencia se transfiere a tu atuendo sudado, por lo que si decides hacer planes luego usando esas prendas de gimnasio sintéticas, húmedas y apretadas, tu esencia se quedará todo el día, incluso si eventualmente se secan.  Y te aseguramos que nadie quiere ser esa persona

  1. Zapatos deportivos desagradables

No olvides cambiar tus medias y zapatos también, o un día tendrás una repugnante sorpresa. «Las bacterias y los hongos aman vivir en ambientes húmedos y calientes» dice la Dra. Shainhouse.  «Más aún, ambas pueden persistir en esos zapatos, lo cual los deja malolientes, incluso si no los has usado por un par de días».  Si el olor no se va aunque cambies de zapatos inmediatamente, ella recomienda rociarlos con un antibacterial y spray antihongos.

  1. Folículos de cabello inflamados

¿Notas granitos en tu trasero? La culpa es de tus leggings.  La foliculitis, es decir, las lesiones de acné causadas por la inflamación e irritación de los folículos del cabello, pueden aparecer en tu espalda, hombros, y trasero cuando pasas más tiempo del que deberías en tu ropa de gimnasio o rozas con equipos cubiertos en bacteria y hongos, dice la Dra. Sheinhouse.Fuente: eonline.com