Soñadora. Esta joven con un futuro prometedor en el camino de la moda se confiesa y revela que hoy estrena su ‘fan page’.
Es una mujer sin filtros. Dulce, pero también osada, con una belleza genuina que impacta a quien la mira.
Sabe lo que quiere y a dónde aspira. Rebeca Foianini es una estudiante del tercer año de Diseño de Moda de la Universidad de Palermo, en Argentina. Reconoce que está “totalmente enamorada de su carrera” y confiesa que no es fácil vivir lejos de su tierra. Su día a día en el vecino país se ha convertido en un reto y agradece a sus padres por la mejor herencia que pueden darle: sus estudios. Hoy estrena su página de fans en Facebook para compartir todo lo que sabe en cuanto a moda.
Vocación desde la infancia. Esta morena de ojos marrones revela que desde que tiene uso de razón tiene una fascinación por la moda. Recuerda que desde niña recortaba las revista de moda de su mamá y las colocaba en un archivador con puros vestidos. “Imaginaba que eran míos y que los llevaba puestos”, dice. Confiesa ser fanática de la alta costura y que pasó clases de bordado y costura.
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Vive el presente. Ella es sincera. Reconoce que cada día en su vida es diferente. Y no puede describir un “día normal en su vida” porque todo lo que hace varía, a excepción del vaso de leche que se toma antes de dormir y de una “miradita” al libro que está leyendo. Describe que generalmente, escoge materias sin importar los horarios y conforme sucedan las cosas se va adaptando al ritmo. “No soy amiga de la monotonía, tampoco soy una persona que hace una lista y tacha todo lo que hace o no hace. Todo dependerá de mi humor”, afirma.
Su vida entre dos países. Como toda mujer que persigue sus sueños, comenta que eligió su universidad porque ha ganado dos años seguidos como la casa de estudios número uno en Latinoamérica en diseño. Aparte que Buenos Aires es una ciudad muy rica en cultura y es “imposible aburrirse”. Sin embargo, también reconoce que es una ciudad muy grande en donde el ritmo de vida es frenético. “A los cruceños nos gusta que nos reciban con una sonrisa y un abrazo y en una ciudad tan grande se pierde un poco esos detalles. Pero con el tiempo me he ganado el cariño de mis amigas y me siento como en casa”, expresa.
Objetivos precisos. Rebeca la tiene clara y le gustaría especializarse en 'haute couture' (alta costura). Por su experiencia en acción social, todos los sábados ejerce como profesora de niños en Buenos Aires. Esto despertó en ella el talento para enseñar, por lo cual le encantaría brindar clases de diseño a chicas jóvenes que les interese la carrera para que conozcan cómo es el trabajo y no crean que se trata de dibujar y mandar hacer, indica.
Una perfeccionista de nacimiento. En su proceso creativo se inspira en las películas de Disney como las de princesas y Lilo y Stich. “Me las sé de memoria y no necesito mirarlas. Siempre tengo que tener una de fondo y eso me inspira. Siento que me llevan nuevamente a mi infancia”, expresa. Reconoce que es perfeccionista y si no tiene tiempo para dormir una semana seguida no duerme hasta que todo le sale bien. Cuenta que por eso, en una entrega final de prácticos, no durmió por tres días y estaba tan cansada que se fue a la universidad con su pantalón de pijama. “Nunca olvidaré la cara de mi docente cuando entré, pero valió la pena porque saqué la nota máxima”, manifiesta.
Aspiraciones. Entre sus diseñadores preferidos están Giorgio Armani y Coco Chanel. Respecto a las nuevas propuestas de los diseñadores para las mujeres con curvas, asegura que le fascina que todos puedan formar parte y sentirse cómodos con lo que está de moda. “Todos tenemos derecho de poder sentirnos identificados con cualquier tipo de marca o diseñador”, dice.
Mirando hacia el futuro Rebeca sueña con ser reconocida internacionalmente, que su nombre se escuche en las grandes ciudades y que la gente se identifique y se sienta parte de su marca.
Fuente: eldia.com.bo