En el cuartel le explicaron a su madre que fue una caída contra una grada. Pero a ella le cuesta creer esta versión por las lesiones que sufrió su hijo: dos costillas rotas, laceraciones en un pulmón, el hígado destrozado, hemorragia interna y otras heridas. El adolescente dijo a la prensa que lo último que recuerda es el llamado para ir al patio de honor del cuartel, después que lo llevaban a la enfermería.Página Siete. Vega se recupera en una habitación de la Clínica Santa Laura.Mucho mejor que cuando llegó, desde su cama en la Clínica Santa Laura, Gerald Vega insiste en que no recuerda lo que le pasó aquel 15 de abril en el Regimiento Escuela Policía Militar (PM) Capitán Luis Saavedra, en la zona de Irpavi.»Tenía instrucción de cuerdas, hacíamos amarres, luego una camilla, y nos mandaron a almorzar. Luego, a formar, fui y ahí nos dijeron que vayamos al patio de honor para recoger nuestras cosas, de ahí ya no recuerdo”, contó el premilitar con la voz apenas audible por los tubos que le pusieron en la garganta durante más de dos semanas que estuvo en terapia intensiva.No recuerda si lo empujaron, si lo golpearon o si sólo se cayó. En el cuartel le explicaron a su madre, Verónica García, que fue una caída contra una grada. Pero a ella le cuesta creer esta versión por las lesiones que sufrió su hijo: dos costillas rotas, laceraciones en un pulmón, el hígado destrozado, hemorragia interna y otras heridas.»Recuerdo que dos amigos me recogían, me llevaron a la enfermería del cuartel. Recuerdo que me traían acá, me dolía, no podía respirar”, añadió Vega. Su estado era grave, por lo que lo indujeron a un estado de coma para introducirle aparatos que de otro modo su cuerpo rechazaría.García cree que su hijo está asustado. «No queremos todavía molestarlo en este aspecto porque él todavía está delicado, pero una simple caída no puede generar tanto daño. El médico nos dijo que el golpe se asemeja más a un choque automovilístico”, dijo ayer en puertas de la clínica.A la misma hora un teniente coronel del Ejército y el médico del cuartel donde ocurrió el incidente, Neil Huaylla, se reunían con el director de la clínica, Mauricio Salazar, a puerta cerrada.Salazar explicó que querían saber cómo estaba el adolescente de 17 años y hablar sobre los gastos médicos y la cobertura del seguro. Pero cuando la reunión terminó el teniente coronel y el médico salieron rápidamente sin intención alguna de hablar con la prensa. «No lo atendí yo, en primera instancia sí, pero después… No me permiten dar declaraciones”, fue lo único que dijo Huaylla.Él tenía libre acceso a Vega cuando éste ya recuperó la consciencia, según contaron los familiares; aunque ahora Salazar evita estas visitas si no es con el consentimiento de la madre, «para evitar susceptibilidades”.El director contó que el premilitar llegó consciente a la clínica pero se lo durmió para que entre a terapia intensiva y se le haga cuatro cirugías. Él tampoco está convencido de que sus heridas hayan sido producto de una caída, aunque indicó que las autoridades competentes se encargarán de averiguar eso. «No es habitual que una caída pueda llevar a tener un trauma hepático pero no estamos libres de que nos pueda pasar, hasta se pierde la vida con una caída”.Ayer el adolescente recibió el alta hospitalaria; es decir que es libre para dejar la clínica e irse a su casa, pero deberá continuar con tratamientos y medicinas hasta ponerse mejor.Defensa apoyará en los gastos médicos y aguarda informe finalEl Ministerio de Defensa apoyará a la familia del premilitar con los gastos médicos debido a que el hecho ocurrió en horas de servicio. Por otro lado, se espera que el Comando General del Ejército emita un informe final sobre lo ocurrido.»Tenemos la obligación de apoyar, vamos a ver los mecanismos, hablaremos con la aseguradora, revisaremos las partidas que tenemos para salud, veremos qué se puede hacer porque este es un tema humano en el que no podemos eludir cierta responsabilidad”, manifestó ayer el ministro del área, Reymi Ferreira.La autoridad reconoció que el seguro que cubre a los premilitares y a los soldados no supera los 3.000 dólares; pero en el caso de Gerald Vega los gastos rondan los 40.000 dólares.Después de lo que ocurrió en el cuartel de Irpavi no se llevó al premilitar al hospital de la Corporación del Seguro Social Militar (Cossmil) porque este centro cuenta con un presupuesto reducido, explicó Ferreira. Aunque los 3.000 dólares del seguro tampoco es una cifra considerable, pocas veces tuvieron problemas para cubrir los accidentes que se dan durante el servicio militar.Aunque hay casos como el de Vega, situaciones graves que impulsan a que Defensa analice las cláusulas del contrato con la aseguradora.El Ministro también dijo a la prensa que espera el informe final de lo que ocurrió aquel 15 de abril. Hasta no tenerlo en sus manos no puede dar crédito a la versión oficial de que Vega cayó y descartar que el adolescente haya sido víctima de abusos.»La versión oficial dice que él cayó y chocó contra un pretil; pero esperamos que haya un informe final que por supuesto debe tener la versión del premilitar. Él debe decir su verdad, corroborar o desmentir esa versión”, concluyó.Página Siete / Sergio Mendoza / La Paz