La increíble excusa del presidente de Bolivia para atornillarse en el poder


Pero Morales está lejos de ser Angela Merkel. Merkel es la jefa de estado de una democracia parlamentaria, que puede ser despedida por el parlamento en cualquier momento. Morales encabeza un sistema presidencialista, en que el presidente –especialmente desde que asumió el cargo en 2006– tiene poderes casi absolutos.

A diferencia de Morales, Merkel no hace construir museos sobre sí misma. Morales recientemente inauguró un museo de $ 7.1 millones de dólares para glorificar la historia de su vida, con una estatua de tamaño natural de sí mismo, en su pueblo natal de Orinoca. No es sorprendente que muchos bolivianos lo llamen “Ego” Morales.A diferencia de Morales, Merkel no defiende dictaduras. Morales es un aliado incondicional de Venezuela, Cuba e Irán.

A diferencia de Morales, Merkel no ha exiliado a sus rivales políticos, ni hostiga a los medios independientes ni a grupos de derechos humanos.Hasta ahora, Morales se ha protegido de las críticas internacionales invocando su ascendencia indígena, y mostrándose como una víctima de la discriminación racial. Cuando lo entrevisté hace muchos años y le pregunté si no había exagerado al decir que “la Cultura de Occidente es la Cultura de la muerte”, desvió la pregunta diciendo que quienes lo criticaban eran racistas.

Pero después de casi 12 años en el cargo y una larga lista de abusos de poder, el nuevo intento de Morales de cambiar una vez más su Constitución e invalidar el referéndum de 2016 merece una condena internacional. Su intento de violar el estado de derecho es una vergüenza, y su argumento de que lo hace en nombre de sus derechos humanos es un insulto a la inteligencia.

“OPPENHEIMER PRESENTA”

Fuente: http://www.elnuevoherald.com


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