
No es que a sus 40 años piense en retirarse, más bien la presión de su esposa, Gisele Bundchen, quien desea que el QB no padezca secuelas de problemas físicos.La modelo ha afirmado desde hace años que no desea que Brady siga en los emparrillados e incluso reveló que algunas veces tuvo síntomas de conmociones, y hay reportes de que buscó a Jay Feely, excompañero de Tom en la universidad de Michigan, para convencerlo de que no siga en la NFL.Gisele aprovechó unas vacaciones con Feely y su familia para persuadir a Jay que convenciera a Brady de retirarse, según Sports Illustrated.
Fuente: foxsports.com.ar
