Danilo Romano renunció al Viceministerio de Políticas Comunicacionales a solo siete días de asumir el cargo. Lo hizo con cuestionamientos al ministro de la Presidencia, Jerjes Justiniano, y los pedidos de despido a su personal.
“Veo necesario aclarar que como Viceministro de Políticas Comunicacionales me negué a viabilizar ‘Consultorías Internacionales Comunicacionales’, así como el inhumano despido masivo de mi personal. Coaccionado con bajezas el Ministro de la Presidencia, Jerjes Justiniano, solicitó mi renuncia a 5 días de mi posesión” (Sic), reseñó Romano en su cuenta en Facebook.
Aunque en su publicación en la red social no mencionó ninguna prueba de lo afirmado, aseguró que “no me prestaré para que se haga uso y abuso de los recursos del Estado para apoyar una tendencia política, mis principios y valores están primero, y aunque me busquen las caries que tuve sepan que los ciudadanos lucharemos ante cualquier tirano sea del color político que sea”.
Romano juró al cargo el jueves 21 de noviembre. Ese día, la ministra de Comunicación, Roxana Lizárraga, también posesionó a Mónica Coelho como Viceministra de Gestión Comunicacional y presentó a “verdaderos” dirigentes del TIPNIS.
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“Ha sido una sorpresa encontrarme en este acto con mis hermanos de la CIDOB, he tenido el orgullo de marchar con ellos en la octava marcha del TIPNIS”, contó Romano y luego añadió: “esperamos poder colaborar a que podamos tener paz, democracia y nuevas elecciones transparentes apoyando a nuestra Presidenta y nuestra Ministra”.
Luego destacó el aporte de la “generación pititas”, que, a su juicio, sirve también para unir a los bolivianos”. El movimiento surgió en medio de las movilizaciones que derivaron en la renuncia de Evo Morales.
En su carta de dimisión fechada el 28 de noviembre, Romano da cuenta que le observaron un vínculo familiar que podría generar “problemas”, el cual explicó. También advirtió de la intención de despido de “funcionarios de base” y pidió no avanzar en ese plan por el bien de las familias de los afectados.
“Desde el Ministerio de la Presidencia se dijo que respetarán todos los derechos, que no habría despidos masivos de los funcionarios públicos de base. Por favor cumpla su palabra, recuerden que detrás de cada funcionario hay una familia, la Navidad y el Año Nuevo se aproximan, cualquier radicalismo, sea de izquierda, centro o derecha es malo”.
También consideró que “la democracia se trata de respetarse unos a otros con pluralidad y alternancia en el poder, no es blanco o negro, somos una Bolivia multicolor”. (03/12/2019)